Isco celebra el 1-0 que facturó en el último compromiso ante el Linares. / El Periódico de Antequera
La Sierra Sur continúa exportando talento en los últimos meses. Dos de las últimas joyas que han emigrado desde el corazón de Andalucía han sido el mediocentro Francisco Gómez Guillén, Isco, y el delantero Javier José Borrego González, Maero, que se han enrolado en el Antequera, del grupo IX de Tercera División. El pivote abandonó el Pedrera, del grupo II de Primera Andaluza, en verano, una decisión que emuló el 9 de Estepa en el mercado invernal. Su relevancia en la escuadra que dirige Juan Carlos Cuevas ha sido absoluta desde el estreno liguero, aunque su cuota de protagonismo creció el pasado domingo en el envite ante el Linares Deportivo, intratable líder y semifinalista de la Copa Real Federación Española de Fútbol (RFEF).
Isco anotó el 1-0 en los primeros compases, mientras que el ariete estepeño facturó el 2-0 antes del intermedio y mientras notaba unas molestias en los isquiotibiales que propiciaron su retirada del césped. El papel de Isco ha sido sobresaliente desde el inicio. El mediocentro es el jugador que más minutos ha acumulado en el bloque de El Maulí. El ex del Pedrera ya ha computado 1.987 minutos en un plantel en el que, pese a su condición de centrocampista, ya ha festejado un total de cuatro dianas. Curiosamente, el pedrereño es el segundo máximo artillero. El pichichi es, con 10 dianas, Henares, ex del UCAM Murcia.
Sus cualidades fueron un reclamo para un intermediario que en el mercado de invierno trasladó al pedrereño una suculenta oferta procedente de Murcia, aunque el cerebro declinó la propuesta de carácter formal a causa de sus compromisos académicos, ya que entonces cursaba el Grado Superior de Educación Física y en septiembre pretende iniciar sus estudios en un Grado de Fisioterapia en la Universidad de Osuna. Maero, mientras tanto, continúa tratando de ganarse el dorsal de titular en un bloque especialmente joven que anhela conquistar la permanencia en Tercera División.
