Los 1.800 alumnos de la Universidad de Sevilla que tienen concedida una beca erasmus para estudiar el próximo curso en campus europeos se irán teniendo asegurado el 70% del importe total de la beca. Es decir, 420 euros de los 600 que supone la ayuda. El 30% restante, 180 euros, que la Universidad desembolsa una vez que el alumno ha regresado a España y ha demostrado el "aprovechamiento académico", está en el aire. La institución académica ha emitido una resolución rectoral en la que modifica las condiciones aprobadas en noviembre de 2011 al "no tener la seguridad" de que las administraciones que costean el programa Erasmus, fundamentalmente la Junta de Andalucía, vayan a cumplir con los compromisos adquiridos.
Una beca erasmus costa de tres pagadores: la UE, a través del Organismo Autónomo de Programas Educativos Europeos, concede 110 euros al mes a cada alumno; el Ministerio de Educación y la Junta de Andalucía. El ministerio anunció, una vez que la convocatoria de becas se había resuelto, que reducía en un 42% la aportación al programa de movilidad internacional. El Gobierno el año pasado concedió 150 euros al mes a cada alumno.
Haciendo una extrapolación del recorte general, la ayuda quedaría para el curso que viene en 78 euros mensuales. La mayor cuantía de la beca la pone la Junta de Andalucía, que desde 2008 completa la aportación hasta llegar a los 600 euros al mes. Aunque la Administración autonómica ha prometido a las universidades que contribuirá, la realidad es que a fecha de hoy el dinero ni está ni se le espera. Ante esta situación, "resulta ineludible proceder a la modificación de las bases de la convocatoria", señala el rector de la Universidad de Sevilla, Antonio Ramírez de Arellano, en su resolución de 11 de julio de 2012 y a la que ha tenido acceso este periódico.
"La Universidad está haciendo un esfuerzo ímprobó", afirmó ayer Enrique López Lara, director del Centro Internacional que gestiona este programa. López Lara recalcó que la Universidad es una mera intermediadora pero es la que adelanta la cuantía de la beca. Ante la falta de "seguridad" de que las administraciones costeen el cien por cien de la ayuda, la Universidad ha optado por ser "prudente" y advertir a los afectados de cuáles son las condiciones "sobrevenidas" que dejan en el aire 180 euros del total de la beca. De esta cantidad, correspondiente al pago del 30% de la ayuda que se abona una vez que el alumno demuestra que ha cumplido con sus obligaciones académicas en la Universidad de destino, "se pagará lo que podamos", avisó el director del Centro Internacional.
La Universidad de Sevilla también ha decidido aclarar el número de meses que se abonarán: un total de ocho. "En aquellos supuestos en los que la estancia sea igual o superior a nueve meses serán financiados únicamente con los fondos asignados por la UE y por la Junta en los importes y condiciones que establezca". Los cambios en la convocatoria Erasmus han sido remitidos a todo el personal de la Universidad de Sevilla y comunicados personalmente a los afectados, así como a los centros. López Lara reconoció que ya hay alumnos que han preguntado por las modificaciones y que, en la mayoría de los casos, "los asumen porque saben cómo está la situación". A los cambios cabe recurso.
