El joven que fue agredido y robado por José Fernando, hijo de José Ortega Cano, se ha opuesto a su libertad porque cree que la supuesta oferta de trabajo que ha recibido es una maniobra "torpe" y el certificado sobre su escolarización está emitido por el instituto de una localidad de Madrid donde no vive.
El abogado de Jonathan V.A., en un escrito al que ha tenido acceso Efe, pone en duda que los familiares que se han ofrecido para acoger al joven puedan controlarlo puesto que su propio padre no lo ha hecho y añade que la matrícula en un centro de enseñanza por correspondencia no demuestra que José Fernando "haya abierto un libro en su vida".
El abogado Manuel Manzaneque se opone a la libertad de José Fernando, encarcelado desde el 14 de noviembre por golpear, robar y quemar el coche de un joven tras un incidente en un club de alterne de Castilleja de la Cuesta (Sevilla).
La Fiscalía de Sevilla también se ha opuesto a su libertad pero solo mientras queden por practicar "diligencias esenciales", entre ellas la rueda de reconocimiento a que se van a someter hoy José Fernando y sus cuatro amigos imputados por el incidente.
En cuanto al anuncio de la defensa de José Fernando de que va a ingresar en un centro de rehabilitación, la acusación particular entiende que solo pretende justificar mediante un centro privado y caro la supuesta drogadicción que "en ningún momento puso de manifiesto en la entrevista psicológica previa" a su ingreso en prisión, cuando no dijo ser drogadicto o precisar rehabilitación.
José Fernando ha aportado a la juez de instrucción 5 de Sevilla la oferta de trabajo de un empresario que dice saber que "ha trabajado siempre de forma honrada", pero Manzaneque responde que "nadie se puede tomar en serio ese documento" cuando "es de público y notorio conocimiento que el señor Ortega no ha trabajado en su vida".
Rechaza también el certificado emitido por un instituto de Alcobendas (Madrid) según el cual José Fernando es un "alumno normal", pues su residencia oficial es Castilblanco de los Arroyos (Sevilla), donde está ubicada la finca "Yerbabuena" de su padre.
La defensa ha alegado también las "dudas sobre su participación" en la agresión, a lo que la acusación particular responde que el propio interesado lo reconoció ante el juez y sus acompañantes lo confirmaron.
La acusación particular solicita a la juez que mantenga la prisión preventiva por presuntos delitos de robo con violencia, daños y conducción bajo los efectos del alcohol, con la agravante de alevosía, ya que tales delitos "sobradamente pueden superar los cinco años de prisión".
