Tres meses ha durado el obligado exilio de la Virgen de los Estudiantes a causa de su restauración. / J. M. Paisano (Atese)
El resultado, una imagen más lozana, más bella de color y con una policromía más transparente y vibrante. La imagen de la Virgen de la Angustia de la hermandad de Los Estudiantes fue repuesta este martes al culto en la capilla de la Universidad tras los trabajos de restauración a los que ha sido sometida a cargo del catedrático de Restauración de la Hispalense Francisco Arquillo.
La intervención, que se ha realizado en el plazo de tres meses, ha consistido en una restauración integral de la imagen, desde su estructura hasta sus capas polícromas, destacando como logro fundamental la recuperación prácticamente al cien por cien de la policromía original que le imprimió su autor, Juan de Astorga, en 1817 cuando fue gubiada. Esta imagen, al igual que otras muchas, ha sido muy tocada por personas con muy buena voluntad pero con escaso acierto. De hecho, la policromía originaria estaba recubierta de un repinte burdo, explica Arquillo.
Gracias a las pruebas de pigmentación realizadas sobre la imagen se comprobó que la policromía original se conservaba en un amplísimo tanto por ciento, lo que ha permitido que la imagen recupere su tonalidad originaria. Afortunadamente para la hermandad, se ha logrado recuperar esa policromía característica de su autor, devolviéndole a la imagen un esplendor y una viveza inigualables.
En cuanto a la estructura de la imagen, Arquillo y su equipo, compuesto en total por unas siete personas, han sustituido el candelero de la talla por otro que se ajusta de forma más coherente a su anatomía. En una de estas intervenciones anteriores le habían puesto uno totalmente desproporcionado con el tamaño y el porte de la imagen.
Gracias a la Fundación de Investigación de la Universidad de Sevilla, que permite al profesorado universitario establecer contratos con entidades privadas y disponer de los medios técnicos que la Universidad pone a su alcance, los trabajos de restauración se han llevado a cabo en distintos departamentos de la Facultad de Bellas Artes.
En palabras de Arquillo, la dolorosa de la hermandad de Los Estudiantes no va a presentar cambios sustanciales que sorprendan a nadie, aunque al retirar la capa de suciedad el resultado ha sido una imagen más lozana, más bella de color y con una policromía más trasparente y vibrante.
En la hermandad no ocultan su satisfacción con el resultado final. Arquillo y su equipo han hecho un trabajo muy bueno, asegura el hermano mayor, Antonio Piñero. Evidentemente, se va a ver más clara porque está más limpia, pero sigue siendo la Virgen de la Angustia.
Sexta intervención en siete décadas. La comandada por el profesor Arquillo es la sexta intervención que sufre la imagen de la Virgen de la Angustiia desde 1942, año en que la hermandad adquiere a la parroquia de San Isidoro la dolorosa que fuera titular de la Cofradía del Despedimiento de Cristo. Anteriormente, la talla fue restaurada por José Rivero García (en los años 1944 y 1951), Ricardo Comas (1981), Luis Álvarez Duarte (1985) y Juan José Lupión (1997).
