Una apuesta por la innovación. La Virgen del Rosario de Monte-Sión visitará la Basílica de la Macarena el próximo 1 de noviembre bajo un palio de traslado de ocho varales portado a hombros por 22 hermanos y que estrenará para la ocasión. La junta de gobierno de la corporación de la calle Feria acordó anoche, en cabildo de oficiales, que la dolorosa de la calle Feria estrene en su anual rosario de la aurora esta pieza que ha sido donada a la hermandad por un grupo de hermanos, entre los que se encuentra el prioste de la cofradía y director de su ejecución, José Ramón Paleteiro.
Bajo un cielo tachonado de estrellas y bordado sobre terciopelo de color burdeos, el palio inspira su traza en el antiguo palio negro bajo el que procesionó la dolorosa durante la segunda mitad del XIX y primeros años del XX, conjunto que fue plasmado por el pintor Joaquín Sorolla en uno de sus lienzos. Realizado en el taller de bordados de la hermandad bajo la dirección del bordador José Ramón Paleteiro, este palio a escala estará sustentado sólo por ocho varales, que serán los antiguos del palio de Monte-Sión a los que se les suprimirá un tramo para rebajar su altura.
Según consta en la documentación que obra en el archivo del Palacio Arzobispal,la Virgen del Rosario fue la primera dolorosa que procesionó bajo palio en Sevilla. Ya en 1592 el cabildo de la hermandad encargó al platero Juan de San Vicente la ejecución de cuatro varas de plata para las andas de Nuestra Señora.
En la diócesis de Sevilla, la hermandad de la Soledad de Alcalá del Río conserva la tradición de cobijar a su dolorosa bajo un pequeño palio de ocho varales. Se trata del palio de los traslados, que la corporación utiliza cada vez que llevan a la Virgen desde la capilla de San Gregorio de Osset hasta la parroquia de la Asunción, donde celebra sus cultos.
