Local

"La Virgen se merece la plaza"

Un grupo de vecinos de Bellavista defiende que la plaza de las Cadenas pase a llevar el nombre de la dolorosa del barrio y cree que la confrontación creada con el cambio es «un tema político».

el 27 ene 2014 / 23:00 h.

Grupo de vecinos partidarios al cambio de la plaza de las Cadenas y el hermano mayor, en la puerta de la parroquia. / J.M.Paisano Grupo de vecinos partidarios al cambio de la plaza de las Cadenas y el hermano mayor, en la puerta de la parroquia. / J.M.Paisano María porta varias fotografías de la presentación de sus hijos a la Virgen hace 30 años. "Entonces salía el 12 de septiembre, el día de su santo, y le presentábamos los niños en la plaza de las Cadenas. Mira en ésta estoy con mi hijo mayor, pero también presenté a los otros dos que tengo», explica esta vecina de la calle Espejo, que lleva 57 años viviendo en Bellavista y es el número ocho en la nómina de la cofradía. Ella y otros tantos vecinos –dicen que son "mayoría"– están de acuerdo con que la plaza de las Cadenas pase a llamarse plaza de María Santísima del Dulce Nombre, como aprobó el Pleno de diciembre con los votos del PP y el PSOE. Frente a ese otro sector vecinal crítico con el cambio que defiende motivos históricos y sentimentales al movimiento asociativo de Bellavista, estos vecinos recuerdan lo reciente del nombre y la vinculación que también tiene la plaza con la dolorosa del barrio. "Siempre ha sido el Llano. Hasta los años cincuenta que se trajeron las cadenas retiradas de la Catedral, esto ha sido siempre el Llano. Incluso antes hubo un tiempo que fue plaza de Miguel Cervantes", asegura otro vecino, Antonio Molina, presidente del Centro Cultural de Bellavista y miembro de la asociación vecinal La Salud, la otra entidad del barrio. Tanto María como Antonio exponen sus razones para acometer este cambio en el callejero: "La Virgen se merece esta plaza. Todas las devociones de los barrios tienen su calle, por qué ésta no la puede tener", señalan convencidos mientras apuntan más argumentos a favor: "Hay un movimiento joven alrededor de la hermandad que se mantiene todo el año y que tiene su máximo exponente el Viernes de Dolores, cuando sale la hermandad. Esa tarde es cuando más gente viene al barrio y nos conoce por ello". Fundamentos que remachan los más jóvenes. Apenas tienen 18 años pese al aplomo de sus palabras. Francisco José Murga, Valme Rodríguez, Alejandro Ortega y Alejandra Riego ponen sobre la mesa la labor social y parroquial que está desempeñando la hermandad en el barrio. "Está dando de comer a muchas personas a través del comedor social y dando a conocer el nombre del barrio al resto de la ciudad". A lo que Juani, que contrajo matrimonio ante la Virgen en la parroquia del Dulce Nombre, añade:"Es un homenaje al barrio entero, más allá de la hermandad. No hay inconveniente alguno en que la plaza se llame Mª Stma. del Dulce Nombre". Quizás por ello algunos no terminan de entender la polémica que se ha levantado "a posteriori" con una modificación que ya reza en el callejero de la web del Ayuntamiento y que, según la hermandad, contó con el apoyo de tres de los cinco vecinos empadronados en la plaza, así como de una de las dos entidades con sede allí. Macarena, por ejemplo, es una de las afectadas directamente. Vive en la polémica plaza y, desde un principio, apoyó la propuesta. "Soy hermana del Dulce Nombre y, la verdad, no comprendo tanto revuelo". Una opinión que también comparte Ascensión, otra vecina de Bellavista. "A la gente le gusta la idea, aunque todo ese movimiento de oposición que se ha creado se está viendo que es un tema más político que otra cosa". Desde la hermandad se pide "respeto" al proceso democrático que alumbró esta transformación. "Cuando se rotuló la calle Alvar Negro con el nombre de Manuel Gonzalo Mateu, nos pudo gustar más o menos, y respetamos la mayoría democrática que adoptó el Ayuntamiento, sin buscar crispación alguna entre vecinos", insiste el hermano mayor, Alfonso Lozano, que se muestra dispuesto "a dialogar con todos como órgano de la Iglesia que es la hermandad", aunque también asegura que "no se ha pensado en ninguna otra calle", pues, en esta plaza, llegó la Virgen del Dulce Nombre por primera vez en 1964 y se le impuso la corona realizada con el oro donado por los vecinos. "Aquí se celebraron las primeras velás de Bellavista, que eran en honor a la Virgen del Dulce Nombre, cuyo fundador fue nuestro primer párroco, José Antonio Pérez Domínguez".

  • 1