La inminencia de una reforma fiscal global en la primera parte del 2014 --impuesta a España por la Unión Europea-- ha vuelto a abrir el melón de la deducción por compra de vivienda, de la que se benefician unos seis millones de contribuyentes. En contra de su promesa electoral de recuperar en el IRPF la bonificación mutilada por el Gobierno de Rodríguez Zapatero (que en el 2011 afectaba a unos 6 millones de contribuyentes), el Ejecutivo de Mariano Rajoy la ha suprimido de forma radical para las viviendas adquiridas a partir del 2013 y ahora tiene sobre la mesa el debate de si también se recortará esta deducción para las casas que se compraron antes de enero del 2013. El comité de expertos para la reforma fiscal creado por el Gobierno está dando vueltas a esta última idea y así se lo han transmitido a los hombres de negro de la troika (FMI, UE y BCE) que han visitado España en los primeros días de diciembre. El secretario de Estado de Hacienda, Miguel Ferre, ha dejado la puerta abierta a retocar esta deducción con efectos retroactivos (para viviendas adquiridas antes de enero del 2013). Según Ferre, la deducción por compra de vivienda es una situación de derechos adquiridos y no tendría sentido eliminarla de golpe y porrazo o de forma brusca y sin alternativa. EXPECTATIVA DE DERECHOS Muchas familias se decidieron a comprar una vivienda antes de enero del 2013 para poder beneficiarse de la deducción del 15% de las cantidades destinadas cada año a este fin con un límite de 9.040 euros. La cuestión que se plantea es si es legal, e incluso constitucional, eliminar o recortar ahora la deducción por compra de vivienda para quienes ya disfrutan de ella. Y la respuesta unánime de tres exdirectores generales de Tributos consultados es que sí. Que es legal. Que más allá de si es conveniente recortar o eliminar esta deducción, si el Gobierno quisiera adoptar una decisión de este tipo no chocaría con la Constitución. Es la opinión compartida por los fiscalistas Miguel Ángel Sánchez, Jesús Gascón y José Manuel de Bunes. Sánchez fue director general de Tributos del 2001 al 2004, con Cristóbal Montoro como ministro de Hacienda. José Manuel de Bunes ocupó este cargo entre el 2004 y el 2008 y Jesús Gascón, entre el 2008 y el 2011, ambos con Pedro Solbes como ministro. Todos ellos tuvieron sobre la mesa, en algún momento, la decisión de retocar la deducción por compra de vivienda y así se hizo en los dos primeros casos. La confusión viene porque tendemos a hablar de derechos adquiridos, empieza Gascón. Pero desde el punto de vista jurídico, hacia el futuro la deducción por compra de vivienda es una mera expectativa de derechos que no habilita para ningún tipo de reclamación por responsabilidad del Estado. Existen abundantes sentencias del Constitucional en esta dirección, explica De Bunes. Una cosa es la retroactividad en el sentido de que una norma no puede obligar a devolver cantidades ya desgravadas en el pasado y otra cosa es un cambio hacia futuro. Y eso no supone que la norma sea retroactiva. Sánchez solo atisba un resquicio por el que el principio constitucional de la seguridad jurídica podría imponerse. Hasta ahora, siempre que se ha tocado la deducción por compra de vivienda habitual se ha establecido un régimen para compensar los derechos del pasado. Alguien podría argumentar que como siempre ha sido así, cualquier contribuyente al comprar una casa antes del 2013 contaba con, al menos una compensación, explica. En todo caso, Sánchez atribuye escaso peso a este argumento si se compara con la extensa jurisprudencia del Constitucional que avalan la retroactividad media o impropia de las normas fiscales, que es la que afecta al futuro. El propio Gobierno de Rajoy ha eliminado hacia el futuro la compensación que existía para las viviendas adquiridas antes del 20 de enero del 2006. Otro ejemplo es la reciente eliminación de la libertad de amortización hasta el 2015 que existía en el impuesto de Sociedades.