Uno al lado del otro y turnándose en el uso de la palabra, los rectores de Sevilla y Málaga defendieron el proyecto de campus de excelencia Andalucía Tech con un auditorio ya atiborrado de presentaciones, power point y discursos (Sevilla era de las últimas en presentar su propuesta. Eran casi las tres de la tarde cuando empezó su exposición). Pero al margen de estas adversidades, Joaquín Luque y Adelaida de la Calle hicieron una defensa sobria, seria y bien estudiada del proyecto. Explicaron que Andalucía Tech es fruto de una "sintonía perfecta" entre ambas instituciones que nace con una vocación internacional y con el objetivo -repetido hasta la saciedad durante toda la mañana- de captar a los mejores talentos, tanto científicos, como docentes y de estudiantes. "Con Andalucía Tech nos situaremos entre los mejores campus tecnológicos del mundo", concluyó el rector de la Hispalense. La propuesta de Sevilla y Málaga se centrará en una especialización en las áreas de tecnologías de la producción, información y comunicaciones y de la biotecnología.
El proyecto con el que Sevilla, en colaboración con Málaga, quiere obtener el sello de campus de excelencia internacional está inspirado en el modelo de los campus franceses, ingleses y alemanes. Andalucía Tech aglutina a una comunidad universitaria de más de 120.000 miembros y ha logrado la agregación o apoyo de 150 entidades, desde empresas a instituciones. En el acto, por parte de Sevilla, estaba presente el director del parque tecnológico Cartuja 93, Isaías Pérez Saldaña; el delegado de Urbanismo, Manuel Rey; y José Domínguez Abascal, en representación de Abengoa (empresa tractora del proyecto). Hacer realidad Andalucía Tech de aquí a 2015 costará 143 millones de euros, con los que se financiarán 50 acciones de mejora en tres campos: la docencia, la investigación y la transformación del campus. Dentro del primer ámbito, Sevilla y Málaga quieren "potenciar el aprendizaje del estudiante". ¿Cómo? Pues mediante el bilingüismo y un centro de doctorado, entre otras muchas cosas. En el ámbito de la ciencia, con Andalucía Tech, Sevilla y Málaga lograrán pasar de 90 a 175 patentes en el plazo de cinco años. Estarán relacionadas con seis polos de excelencia: aeroespacial, biotecnología, comunicaciones y movilidad, energía y medio ambiente, transporte y turismo y desarrollo territorial.
En cuanto a la transformación del campus, el rector de la Universidad de Sevilla aludió a la construcción de más residencias para poder acoger a los profesores, científicos y estudiantes que Andalucía Tech sea capaz de atraer. De esta forma, la intención es pasar de 3.450 plazas a casi el doble, 6.000. ¿Y cómo se gestionará todo esto? Pues con una fundación creada ex professo.
El vídeo elaborado para la fase final del concurso de campus de excelencia tuvo un marcado carácter futurista. Una presentadora iba mostrando y explicando el proyecto por medio de pantallas táctiles. La Universidad de Sevilla no hizo alusión alguna a sus 500 años de historia. Optó en esta ocasión por defender su capacidad de futuro (también la presencia de Málaga obligaba a ir por este camino). En la presentación tampoco se incidió en uno de los mensajes que más se han vendido de Andalucía Tech: el proyecto contribuye a "vertebrar" Andalucía y a romper localismos. Ante universidades de todo el país, este mensaje no iba a ser entendido.
