El presidente de la Asociación de Víctimas de Accidentes DIA, Francisco Cannes, lamentó ayer la condena al torero Ortega Cano por el accidente de tráfico en el que falleció un hombre, por demostrar que en España sale muy barato matar con un coche, por lo que pidió un cambio de la legislación, ya que a su juicio es muy laxa en estos casos. Cannes lamentó en declaraciones a Europa Press que la ley prevea penas de prisión mucho mayores para delitos con resultados menos graves y aplique sentencias más laxas a casos como el de Ortega Cano, condenado a dos años, seis meses y un día de cárcel por homicidio imprudente y conducción temeraria, que es un delito de sangre. Las asociaciones de víctimas llevan años reclamando el endurecimiento de estas condenas por accidentes, en especial cuando los conductores han cometido imprudencias o negligencias al volante. Argumentan que las consecuencias, muchas veces la muerte o lesiones graves, se derivan de comportamientos irresponsables que merecen un mayor reproche penal, al no ser sólo accidentes fortuitos. Así lo reiteró también ayer Stop Accidentes, que consideró que la sentencia contra Ortega Cano no hace Justicia porque se apoya en un sistema judicial obsoleto. No decimos que no se haya cumplido la ley. Lo que decimos es que si la ley dice esto, hay que cambiarla, subrayó el presidente de DIA, que además lamentó que la juez Sagrario Romero haya anulado la prueba de alcoholemia en la que el torero arrojó un resultado de 1,26 gramos de alcohol por litro en sangre al considerar que se rompió la cadena de custodia en el hospital Macarena. Hay que hacer un cambio legislativo muy importante porque los sanitarios lo que menos piensan cuando están tratando de salvar la vida a alguien es en hacer una prueba de alcoholemia, censuró Cannes, que ve injusto anularla por que no se practicara en el lugar del accidente sino luego en el hospital. Por su parte, la Asociación de Prevención de Accidentes de Tráfico (PAT) lamentó que la condena no sea más acorde con el reproche social que estos hechos tienen y el enorme daño que ha causado a la familia. Indicó que la condena al menos supone el ingreso en la cárcel, y la prohibición de conducir vehículos a motor durante tres años y medio puede ayudar a una mayor reflexión, aunque hubiera deseado que se aplicaran los cuatro años que prevé el Código Penal. A su juicio el exceso de velocidad o la conducción temeraria, al margen del grado de alcoholemia, bastan para condenar por los delitos de homicidio imprudente y contra la seguridad vial. La entidad lamentó que, ante conductas que han provocado tanto daño a la familia de la víctima, pero también que perjudican a toda la sociedad, no se tenga un sincero arrepentimiento y el torero no haya dado una disculpa a los familiares. Por eso reclamó que la reforma del Código Penal que estudia el Gobierno incremente la condena de cuatro años y que en reforma de la Ley de Enjuiciamiento Criminal se determine de una forma más clara e inequívoca la realización de la prueba de alcoholemia. Stop Accidentes también criticó la anulación de la prueba al exigir urgentemente que las pruebas de alcoholemia y drogas se hagan de oficio a todos los implicados en un siniestro vial sin necesidad de que lo deba autorizar un juez.