La portavoz vecinal de Gran Vía en Kansas City, AnaMaría Soria, muestra la carpeta en la que va anotando las actividades y reivindicaciones del barrio. / José Luis Montero
Es una de las zonas de reciente expansión del distrito San Pablo-Santa Justa. A un lado de la avenida de Kansas City se levanta la urbanización Gran Vía donde viven 2.000 personas, un censo que se aproxima al de algunos pueblos de la provincia. Hace unos meses crearon una asociación vecinal Gran Vía para gestionar mejor los recursos que reciban y, señalan, trabajar por pequeñas conquistas que suponen «un gran avance para la convivencia de todos».
¿Cómo surge la idea de constituir una asociación? Hace un año acordamos crear una asociación de vecinos que aglutinara a los residentes de la comunidad de propietarios Gran Vía. Hasta la fecha veníamos organizando diferentes actividades, como campamento de verano, fiesta de Halloween, campaña de recogida de alimentos para el Banco de Alimentos, visita al asilo de la zona, cartero real y una fiesta de convivencia para septiembre-octubre en el parque próximo al edificio. Siempre le veníamos pidiendo servicios al Ayuntamiento a través del distrito y nos aconsejaron crear una entidad pues como comunidad de propietarios teníamos más limitaciones.
¿Cómo ha sido el camino hasta quedar inscritos en el registro? La verdad es que no ha sido fácil. Hemos tenido que andar muchos pasos. Hay demasiada burocracia. Tuvimos que elaborar unos estatutos, luego el acta de constitución, presentar de documentación en organismos oficiales... Nos llevamos seis meses para ponerlo todo en pie. No fue tras septiembre cuando quedamos registrados como tal.
¿Con qué objetivo nace? Queremos que todo el esfuerzo de esta joven entidad revierta en los vecinos y en esta zona de Kansas City. Para ello nos plateamos a corto y medio plazo realizar actividades conjuntas que fomenten la convivencia y el bienestar de la barriada, sin renunciar a pedir mejoras, sobre todo en materia de movilidad.
¿Cuál es la principal reivindicación? Somos muchos vecinos 445 viviendas, 40 locales y 523 garajes y no tenemos zonas comunes. Ni siquiera para reunirnos y acoger talleres u otras actividades. Si tuviéramos un espacio podríamos programar actividades deportivas, talleres y cursos... Aquí quien quiere participar de estas convocatorias se tiene que desplazar al centro cívico de San Pablo o a los colegios de zonas vecinas.
¿Qué es lo que proponen? Sería muy interesante que el solar baldío que hay justo al lado de la residencia en la esquina de la calle Macedonia con Santa Clara pudiera revertir en el barrio para uso y disfrute de los vecinos. La podríamos dedicar a zonas deportivas y para habilitar un salón para la asociación donde poder realizar más actividades o talleres educativos.
¿Han tenido la ocasión de estrenarse ya en un pleno del distrito? Sí, bueno, hemos ido a una reunión sobre subvenciones y ayudas a las entidades ciudadanas en enero. Pero a un pleno como tal todavía no hemos asistido.
¿Qué expondrán cuando llegue ese momento? Lo primero de todo:potenciar el parque que tenemos aquí al lado y que cada tarde usan muchos niños. El parque, al que habría que buscar nombre, necesita muchas cosas. La más urgente por seguridad e higiene es eliminar bordillos y chinos de la zona de juegos infantiles. Es un peligro para los más pequeños que se los tragan y para los mayores que se caen continuamente. Tenemos ya recogidas éstas y otras peticiones, como accesos para personas con discapacidad, fuentes de agua, más bancos y más juegos de niños, en un documento.
¿Habéis tenido ya un primer contacto otras entidades de la zona? ¿Qué impresión os han dado? Estamos en ello. La verdad es que nosotros partimos de cero en esto, aunque tenemos claro que las asociaciones vecinales están para que se les escuchen, pero nada más. No tenemos ninguna experiencia en el movimiento asociativo, pero nos está yendo bien. De las primeras peticiones que hemos realizado, como es servicios para la fiesta de convivencia de este año, hemos obtenido una respuesta positiva.
¿Y cuál cree que es la clave, pues hay otras entidades que se llevan más tiempo pidiendo cosas? Pedir con cabeza y por los cauces oficiales que tiene el distrito. Eso sí, hay que estar siempre muy pendientes, saber exponer el proyecto y tener las ideas muy claras.
El alcalde os visitó hace dos años, ¿qué os prometió? Vino el alcalde y el concejal delegado.De todo lo que hablamos durante la visita, se han hecho algunas cosas, como acabar con las barreras arquitectónicas en la zona próxima al Mercadona, pero quedan otras muchas por hacer, como una reordenación del tráfico a la salida del edificio que por fuerza nos obliga a pasar por una gasolinera. Es muy importante poner un semáforo y un paso justo frente al Burguer King y el Mercadona, ya que diariamente cruzan muchas personas saltando la mediana con el consiguiente peligro. Además urgen pasos de peatones en los cruces peligrosos que hay en la calle Francisco Vázquez Coronado, próximo al colegio Santo Ángel de la Guarda.
