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Las carreteras y el aumento de población obligan a la Guardia Civil a reordenarse

Los 69 puestos de la provincia se reestructuran para ser más útiles.

el 09 ene 2011 / 17:56 h.

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El pasado 30 de junio se inauguraron las nuevas instalaciones conjuntas de Guardia Civil y Policía Local de La Rinconada.

La Guardia Civil ha reestructurado por completo la organización de los 69 puestos que tiene diseminados por toda la provincia, para adaptarse a los cambios de población y a las nuevas infraestructuras públicas habilitadas para conectar los municipios. Los importantes cambios en la red de carreteras, como por ejemplo la A-4, la AP-4, la A-66 o la Ruta de la Plata, o el crecimiento de nuevas barriadas han dado lugar a situaciones absurdas, como que una población dependa de una comandancia que le resulta lejana cuando tiene otra al lado. O que el cuartel esté situado a un lado de la carretera diferente del grueso de la población. Por eso ahora, todos los nuevos cuarteles se harán teniendo en cuenta la facilidad de acceso a través de estas nuevas carreteras.

"Con el tiempo y las nuevas infraestructuras, el despliegue de la Guardia Civil se quedó obsoleto y hemos hecho una reorganización estructural. No se ha cambiado número de puestos ni efectivos, pero sí la organización", explica el coronel jefe de la comandancia de Sevilla, Juan Roldán, que tiene más de 2.500 efectivos bajo su mando. Por ejemplo, Roldán explica que los municipios de Mairena y El Viso del Alcor, que están pegados a Carmona, pertenecían hasta ahora a la compañía de Alcalá de Guadaíra. La reestructuración hará que pasen a depender de Carmona, igual que toda la comarca de Los Alcores. Utrera, en cambio, pasará a depender de Alcalá de Guadaíra.


Los cambios de población también han hecho que puestos que antes eran menos importantes hayan sido reforzados con equipos de investigación, antes incluso que otros de mayor entidad. Los cambios harán tabla rasa y las seis compañías territoriales -ubicadas en La Rinconada, Cazalla de la Sierra, Sanlúcar la Mayor, Carmona, Osuna y Alcalá de Guadaíra- dispondrán todos de un equipo de investigación, una patrulla del Seprona -protección de la naturaleza- y un equipo reducido del Emume -de atención a la violencia doméstica y a los menores-. Estos últimos equipos estarán además en otros tres puestos, los de mayor población. Junto a las seis compañías principales, la estructura de la Guardia Civil en Sevilla se completa con la Plana Mayor, la del Puerto y el Subsector de Tráfico.

"Todos estos cambios se harán sin costes ni traslado de gente", señala Roldán, que recuerda que, aunque la crisis ha hecho mella en los pueblos recuperando delitos de menor calibre como los robos en el campo, la principal atención del cuerpo sigue estando en las zonas urbanas, donde vive la mayor parte de la población y, por tanto, se genera la mayor parte de la delincuencia. Cada vez más urbana, porque muchos pequeños pueblos se han convertido en grandes ciudades: "Las poblaciones han crecido mucho", dice el coronel, "Utrera, Osuna o Écija serían capitales de provincia en Castilla, y no hablemos de Alcalá de Guadaíra o Dos Hermanas. Nos estamos volviendo más urbanos y donde más esfuerzo están haciendo las fuerzas de seguridad es en las zonas urbanas".

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