El descenso de pateras llegadas a las costas españolas en 2007 no tuvo reflejo en la jornada de ayer, en la que Salvamento Marítimo interceptó dos cayucos en las costas canarias con 131 inmigrantes a bordo.
La primer embarcación que llegó estaba integrada por 54 inmigrantes, entre ellos diez menores y dos mujeres, y fue trasladado desde el suroeste de Maspalomas, en Gran Canaria, hasta el puerto tinerfeño de Los Cristianos, donde fueron atendidos por los Servicios de Emergencias. Uno de los menores tuvo que ser trasladado primero al centro de urgencias de El Mojón, en Arona, y después al Hospital de La Candelaria en Santa Cruz de Tenerife por una crisis convulsiva.
Horas después, una barcaza con 77 inmigrantes a bordo arribó al puerto de La Restinga, en la isla de El Hierro, tras ser avistados por un pescador que estaba cerca del puerto herreño. Salvamento Marítimo precisó que la mayoría de los inmigrantes llegaron "débiles" y algunos estaban aquejados de hipotermia, por lo que nada más desembarcar fueron atendidos por la Cruz Roja.
Al otro lado de la costa, las autoridades de Mauritania interceptaron a otros 41 inmigrantes ilegales que se preparaban para viajar hacia Canarias. El grupo de inmigrantes estaba formado por 25 malienses, 15 senegaleses y uno de Costa de Marfil y todos fueron detenidos cuando se disponían a embarcarse hacia el archipiélago español de Canarias. Los subsaharianos fueron ingresados en el centro de acogida del puerto de Nuadibú en cooperación con las autoridades españolas.
Redada en Ceuta. Un total de 70 inmigrantes, la mayoría de ellos marroquíes y argelinos, fueron detenidos en una redada en el puerto de Ceuta, de los que 17 estaban escondidos en el interior de un barco abandonado. La operación se desarró para aliviar la presión migratoria que existe en las inmediaciones y en el interior del puerto de Ceuta.
Los inmigrantes se acumulan en el puerto para introducirse ilegalmente en los barcos de pasajeros y llegar a la península. En la operación han participado la Policía Nacional, la Guardia Civil y la Policía Local.