Local

'Las mujeres sólo hacemos dos cosas, agradar y cuidar'

Tras 25 años en el «vicio» de la política, la histórica dirigente socialista usa su biografía para recorrer la historia de las mujeres en un mundo de hombres, cuya salida no fue decisión propia ni nadie le explicó. «Feminista acérrima», repasa los logros alcanzados pero aclara que la igualdad real «no se ha logrado ni de lejos». Foto: J.R.

el 15 sep 2009 / 15:50 h.

TAGS:

Tras 25 años en el «vicio» de la política, la histórica dirigente socialista usa su biografía para recorrer la historia de las mujeres en un mundo de hombres, cuya salida no fue decisión propia ni nadie le explicó. «Feminista acérrima», repasa los logros alcanzados pero aclara que la igualdad real «no se ha logrado ni de lejos».

-Es curioso que su libro autobiográfico, Una mujer de mujeres (Aguilar), empiece justo con su retirada política, en 2004.

-Fue un punto de inflexión en mi vida y, entre otras reflexiones, me planteé escribir un libro, aunque inicialmente no iba a ser una biografía sino un ensayo sobre la mujer. Al final hice algo mixto.

-Dice que dejar la política le hizo ver que había otra vida, pero en su libro destila cierto resentimiento, sobre todo hacia José Caballos, porque nadie le dio explicaciones de su salida de las listas electorales.

-La política es como una droga. Era consciente de que había que dejarlo algún día y es bueno hacerlo, pero nunca ves el momento de irte. Había sido mi vida y no me gustó cómo se produjo, aunque probablemente me hubiera costado igual si hubiera sido de otra manera. No me pareció bien que Pepe Caballos hiciera lo que hizo, conmigo y con todas las mujeres, lo dije y lo digo.

-Afirma que las mujeres pasan por la política pero no permanecen porque a los hombres les encanta "descubrir" una mujer nueva: la ensalzan, la usan y la dejan. ¿Se siente un juguete roto? ¿Ve así a Carmé Chacón o Bibiana Aído?

-Los juguetes rotos son jóvenes y se estropean pronto: yo estuve 25 años en política. Las ministras jóvenes, unas se consolidarán y otras no, como antes. Chacón tiene un futuro espectacular, es una gran política. Y la ministra de Igualdad espero y deseo que también. El Ministerio de Igualdad es más difícil que el de Defensa: es nuevo, no se entiende y se la juzgará siempre desde una mentalidad masculina. Va a ser un referente muy importante, tanto como la de Defensa.

-Describe la maternidad como "un problema muy serio para las mujeres, porque es lo mejor de nuestras vidas y nuestra mayor limitación". ¿Habrá igualdad cuando un político dedique un capítulo de su biografía a la paternidad?

-Se conseguirá cuando la vida familiar se comparta, no se concilie, y eso todavía no ha llegado ni de lejos. Las mujeres sólo hacemos dos cosas: agradar y cuidar.

-¿Dónde ha visto más 'Esperpentos', cuando actuaba en el Teatro Español Universitario o en el hemiciclo?.

-En todas partes hay cosas buenas y otras esperpénticas, en política también. Una siempre tiende a pensar que lo de su época era mejor. Ahora desde fuera veo que hay buenos y malos, como antes.

-En los 60, la Policía hacía informes de sus primeras conferencias que le trajeron problemas para obtener un pasaporte. Ya en democracia, reconoce que algunas de sus declaraciones en prensa le causaron dificultades en el PSOE. ¿No se dejan influir demasiado los políticos por los medios hasta gobernar a golpe de titular?

-Yo siempre he tenido muy buenas relaciones con la prensa, tengo muchos amigos periodistas y en general creo que los medios me han tratado bien. Ahora sí es cierto que la creciente importancia mediática hace que muchas veces se haga política a golpe de titular, pero esa manía ha existido siempre. Cuando empecé estábamos todos preocupadísimos por lo que decía un diario del Movimiento, Suroeste, que en realidad tiraba mil ejemplares y sólo lo comprábamos en las instituciones. Eso sigue pasando, sobre todo con la prensa escrita. Le concedemos un valor que no tiene y se hace una política endogámica entre políticos y periodistas.

-¿Cómo vivió una republicana y feminista organizar, como delegada del Gobierno, la boda de la Infanta Elena, que no reinará pese a ser la primogénita?

-No soy especialmente republicana, de hecho ahora soy monárquica. Estoy absolutamente satisfecha con el papel de estabilizador fundamental jugado por la Corona. En la boda lo pasé estupendamente, fue una experiencia de lo más divertida. Sobre la forma de sucesión, responde a un momento concreto. Si la Constitución se hubiera hecho más tarde, no sería así. Pero la modificación es muy complicada y aunque hay que cambiarlo por principios, ahora no es necesario. Generaría tensiones y este país tiene muchas cosas por hacer más importantes, también para las mujeres.

-Se dice alejada del nacionalismo pero asegura que, en la práctica, España es un estado federal.

-La Constitución no tenía voluntad de federal pero no sabía cómo se harían las autonomías y en la práctica, se parece mucho a un estado federal. Hay una magnificación del federalismo.

-¿Cómo es un western su película favorita?. El salvaje oeste era bastante machista.

-Horizontes de grandeza no es cualquier western, es una historia de amor, de relaciones personales, y a mí me encantan los melodramas. De todas formas hay muchos western con mujeres muy potentes.

  • 1