La cláusula de Álvaro Vadillo es el tema que mayor relevancia ha adquirido en los últimos días en el Real Betis. La grave lesión del veloz interior de Puerto Real ha originado que las especulaciones sobre su futuro crezcan a la velocidad de la luz.
Sin embargo, El Correo conoció ayer todos los detalles del contrato que rubricaron el pasado 20 de junio sus agentes, su padre, Jesús Vadillo, el interventor de las acciones de Farusa, José Antonio Bosch Valero, y el director deportivo heliopolitano, Vlada Stosic.
El documento contempla tres escenarios diferentes. A día de hoy, la cláusula del canterano, que ha disputado 4 partidos con el primer equipo, es de 3 millones de euros, cifra que crecerá hasta los 20 en el caso de que participe en al menos 5, con independencia de los minutos que juegue, o en el caso de que disponga de ficha de la primera plantilla. El tercer escenario posible entraría en vigor si el Betis descendiese a Segunda. En ese presunto extremo, y con independencia de su ficha y aun jugando los 5 partidos, su libertad estaría tasada en 13 kilos.
Las negociaciones para renovar a Vadillo en junio fueron especialmente difíciles. Antes de debutar con el filial, su cláusula era de 3.000 euros y su sueldo de 400 mensuales, cifra a la que se debía unir la manutención diaria en la residencia de Los Bermejales. Sus agentes exigían un considerable aumento de sueldo y el club firmó un contrato de diferentes escenarios.
En el momento en el que se estrenó en el B, su cláusula creció de los 3.000 euros -cantidad simbólica- a los 3 millones. Una variable que trataron de incluir sus representantes era que, en el caso de jugar 5 partidos con el A pero disponer de ficha del filial, la cláusula ascendiera de 3 a 5 millones.
Stosic y Bosch Valero no cedieron y ese punto fue finalmente desestimado, clavando el precio de su libertad en 20 millones en el supuesto de que juegue 5 partidos en el primer equipo o disponga de ficha de la primera plantilla.
Pero ese escenario se contempla con el Real Betis en Primera. En el caso de que el conjunto del Benito Villamarín descendiese a Segunda, Vadillo, que firmó hasta el 30 de junio de 2016, podría fichar por otro club a cambio de 13 millones de euros -7 menos de los estipulados en la máxima categoría-.
Pero otra posibilidad es que mañana se confirme que su lesión requiera de 6 meses de reposo. En ese caso, el club podría inscribirlo con ficha del primer equipo para aumentar su cláusula a 20 kilos, aunque en ese supuesto debería haber una revisión, lógicamente al alza, del contrato.
El club aceptó en su día firmar la cláusula de 3.000 euros como señal de confianza en el de Puerto Real, que había recibido una oferta del Real Madrid para unirlo a su División de Honor. Ante el temor de Vadillo de no jugar regularmente en el filial, la dirección deportiva le ofreció una cláusula de 3.000 euros hasta que no jugase en el B, en el que, con el tiempo, se ha convertido en una pieza fundamental gracias a su goles y a la confianza de Vidakovic.
Apoyo familiar
En cuanto a su lesión, el canterano publicó en su twitter una fotografía de su maltrecha rodilla derecha. Su padre, Jesús Vadillo, confirmó ayer a El Correo que la familia continúa en Puerto Real y que no viajará a Sevilla hasta mañana, cuando el jugador se someterá a una artroscopia en el Fremap. El padre del veloz interior comentó que "en algunos momentos siente dolor, aunque está animado".
"Él no pierde la esperanza de que solo sea una rotura parcial y que pueda volver a jugar en unos dos meses", dijo. Los mensajes de ánimo en las redes sociales continúan sucediéndose. "Él está muy agradecido con todo el apoyo que está recibiendo a diario", finalizó.
