Con la economía sumida en una crisis generalizada, bienvenidas son las iniciativas promovidas para motivar contactos y tantear nuevos clientes potenciales. Más de un centenar de pymes de la industria andaluza tendrán la oportunidad de establecer negocio con una treintena de empresas tractoras. Algo que, sin ayuda, no podrían.
No resultaría fácil sentar en una misma mesa a responsables comerciales de multinacionales con gestores de pequeñas y medianas empresas andaluzas y que les dedicaran unos minutos para saber qué pueden ofrecer, a qué precios y si les resulta competitivos para su actividad.
Para salvar ese escollo, el Consejo Andaluz de Cámaras de Comercio y la Federación de Empresarios del Metal (Fedeme) han organizado para los próximos miércoles y jueves una maratoniana agenda de encuentros entre ambos.
Aumentar la cartera de clientes, diversificar y darse a conocer ante potenciales contratistas es el objeto de esta cita en la que los interlocutores contarán con 15 minutos para conocerse. Bueno, en realidad, llegarán a ese encuentro con los deberes hechos, sabiendo a qué se dedica, qué es lo que le podría interesar de la empresa que tiene enfrente y teniendo claro su perfil. Para ello, la Cámara se ha encargado de realizar un cruce de agendas que han dado como resultado unos 1.300 encuentros de trabajo, ajustando al máximo el interés de ambas.
Treinta firmas internacionales de sectores de la rama metalmecánica como el aeronáutico, naval, ferroviario y componentes electrónicos de una decena de países como Italia, Francia, Canadá, Brasil, Chile, Finlandia, Alemania, Inglaterra, EEUU y, también, España, se relacionarán con 151 pymes subcontratistas, en un momento en que este tipo de actividades son muy agradecidas.
En la presentación de la SIMA (Semana de la Industria Andaluza), tanto Antonio Ponce, presidente de las Cámaras andaluzas, como Eusebio Gallego, de Fedeme, valoraron que éstos "son contactos que tanto necesita Andalucía en estos momentos", aseguró Ponce. Para Gallego, es necesario impulsar la industria en momentos en que el IPI (Índice de Producción Industrial) "es el menor desde el año 2002" y en una circunstancia actual en la que "nuestras empresas están en condiciones de competitividad inferior a hace unos años".
Y es que el capítulo metalmecánico absorbe el 33,2% de los empleos totales de la rama industrial -el 25% en 1995-, y aporta una cuarta parte de la cifra de negocio del conjunto de la industria.
La primera edición del SIMA, se organizó por primera vez hace dos años y concluyó con que un 13,4% de los contactos fructificaron en relaciones comerciales concretas. En esa ocasión participaron 31 empresa tractoras y 112 firmas subcontratistas, estableciéndose 1.010 encuentros, según los datos ofrecidos ayer por Antonio María Fernández Palacios, secretario general del Consejo Andaluz de Cámaras.
"Lo importante -reseñó- no es sólo lograr pedidos, sino generar una relación entre ellas". Este año se realizará un seguimiento temporal de todos los contactos para ver en qué quedan y poder traducir en cifras los beneficios que generan estas acciones de intercambio.
