Los presidentes de Colombia, Juan Manuel Santos, y Venezuela, Hugo Chávez, han dado con su acercamiento un primer paso hacia el restablecimiento pleno de las relaciones entre sus países, un proceso largo que requerirá esfuerzos de ambos lados, dijeron ayer analistas, políticos y empresarios. Un acercamiento que se ha recibido de muy buena gana en medio mundo y de forma muy especial en Suramérica.
La decisión de Chávez y Santos de pasar página, anunciada el martes tras su crucial reunión en la ciudad colombiana de Santa Marta, es un paso gigantesco, coincidieron ayer autoridades de ambos países, que también alertaron de que ahora viene lo más difícil: pasar de las declaraciones de buena voluntad a los hechos concretos. "Estoy contenta, fue una muy buena reunión (la de Santos y Chávez), se hablaron muy francamente de las diferencias, pero también es cierto que hay mucho trabajo por hacer", sostuvo la canciller colombiana, María Ángela Holguín, en entrevistas con los medios. A su juicio, lo que está en juego a partir de ahora es forjar una relación bilateral basada en "el respeto del uno hacia el otro", para "construir algo sin insultos, sin ofender". Mucho más explícito fue el vicepresidente del Gobierno venezolano, Elías Jaua, al decir que la reunión de Santos y Chávez ha alejado "los fantasmas de la guerra".
Holguín viajará a Caracas el próximo 20 de agosto para empezar a dar forma junto con su homólogo venezolano, Nicolás Maduro, a las cinco comisiones bilaterales cuya creación se acordó el martes, en línea con el restablecimiento de las relaciones diplomáticas y comerciales.
Santos y Chávez acordaron en Santa Marta restablecer esas relaciones, congeladas desde agosto de 2009 y rotas por decisión del mandatario venezolano el 22 de julio, que respondió así a las denuncias del Gobierno del ahora ex presidente colombiano Álvaro Uribe sobre la presunta presencia de guerrilleros en Venezuela. También prometieron trabajar de forma conjunta para evitar la presencia de grupos armados ilegales en la frontera común y Chávez reiteró que no permite ni permitirá la presencia de la guerrilla en Venezuela, al pedirle a Santos que no deje que "los chismes" e "informes" de otros los pongan a "pelear" de nuevo.
El Gobierno de Uribe llevó hace tres semanas ante la Organización de Estados Americanos (OEA) las supuestas pruebas de la presencia guerrillera en el país vecino y el abogado del ahora ex mandatario presentó sendas denuncias contra Chávez, ante la Corte Penal Internacional, y Venezuela, ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, por violaciones de esos derechos.
Esta reconciliación, impulsada por los mandatarios de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, y Argentina, Cristina Fernández, así como del secretario general de la Unasur, Néstor Kirchner, y del ex presidente cubano Fidel Castro, hace respirar al mundo, ya que los "fantasmas de guerra" se alejan, tal y como afirmó ayer el vicepresidente venezolano, Elías Jaua. La secretaria de Estado de EEUU, Hillary Clinton, dijo que espera que haya "una solución positiva" de las diferencias entre Colombia y Venezuela. Un deseo compartido por países como Francia, México, Brasil, que nada más conocer la noticia no dudaron en valorarla de forma muy positiva, al igual que los empresarios, porque le ayudará a relanzar el comercio bilateral.
