-¿Quién está ganando dinero con esta crisis?
-Tú quieres que te conteste que yo [risas]. Pero hay pescadores que han ganado y siguen ganando. Por ejemplo, toda esa gente que ha inventado productos financieros rarísimos, han ganado mucho dinero. Mucho. Y siguen inventando productos, no creas que se han convertido a la santidad.
-¿Quién va a salir antes de la crisis: los más listos, los más trabajadores, o los que tengan más suerte?
-Lo de la suerte es fundamental [risas]. Y un poco listo hay que ser, pero creo que éste es un momento en el que hay que trabajar muchísimo. Como siempre, y más que nunca. Ahora oigo hablar de que hay que volver a la cultura del esfuerzo, y me pregunto si alguna vez ha sido cultura la vagancia. Toca darle muchas vueltas a la cabeza, porque siguen existiendo muchos productos, y muchos oficios, que interesan a la gente. Y si están bien presentados y bien hechos, la gente está dispuesta a pagarlos. Hará falta ser listo, trabajador y tener suerte para salir adelante.
-Si las empresas no invierten, el gobierno no gasta y los ciudadanos se aprietan el cinturón, ¿cómo va a recuperarse la economía?
-Buena pregunta. Mira, ahora viene una época muy dura. Una familia que ha gastado mucho, y de repente tiene que gastar menos, lo pasa mal. Por eso, cuando me hablan de brotes verdes y esas cosas, sólo me fijo en un indicador: el número de personas sin empleo de la encuesta de población activa. El otro día eran, si no me equivoco, 4.584.700. Por eso nos interesa que las empresas españolas vayan muy, muy bien, para que contraten gente. Es la única manera de salir de la crisis. Sin ellas no podremos hacerlo.
-¿Cuál será la siguiente burbuja por estallar?
-El fútbol. Claro, que tenga trampas el Barcelona o el Real Madrid está mal, pero mi equipo es el Zaragoza, y enterarme de que debe 110 millones de euros, 20.000 millones de las antiguas pesetas... Eso tiene que estallar. Y si te descuidas, desaparecen equipos históricos enteros, porque estaban sostenidos, como todo, por créditos.
-Se habla a menudo de que "los mercados atacan", "los mercados no se fían"... ¿Quiénes son los mercados? ¿Unos señores con corbata, o todo es más abstracto?
-No, no creas que es tan caótico. Vamos a fijarnos, por ejemplo, en España. Los países necesitan dinero, y lo piden prestado. Eso se llama emitir deuda. Entonces llega un señor con dinero para invertir y se pregunta, ¿dónde lo hago, en España o en Alemania? ¿De quién me fío? Pues va a Alemania y dice: "Me tendrás que pagar el 2,7 %". Y como de España no se fía, pero dice: "Si me pagases el 5,4 %...". ¿Es eso un ataque del mercado a España? No lo sé. Lo que creo es que si tuviese dinero se lo daría a aquél de quien me fío. El día que, en la escalada de desconfianza, el dinero se preste al 6, o al 7, haremos ¡crack! y diremos: los mercados nos han hundido. ¿Los mercados, o has sido tú, majo?
-Si finalmente intervienen a España, ¿será la misma bendición que usted ve en la intervención de Grecia?
-Hombre, gracia no tiene ninguna. Que yo no haya sabido administrar a mi familia y tengas que venir a echarme una mano no le gusta a nadie. Pero por lo menos ha servido para que nos demos cuenta de que hay que meterse a fondo en la administración de España. Tengo la sensación de que, tanto por parte de la Administración Central, como por las Autonomías, ha habido una locura, un despilfarro... Y eso atañe a todos los partidos, a todos. En ese sentido, viene una época dura, porque administrando así llega el batacazo.
