El alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido (PP), ya anunció antes de llegar a la Alcaldía que uno de sus retos era mejorar la limpieza de la ciudad. Así que ayer sacó pecho al hacer balance de la operación para renovar Lipasam o, por lo menos, sus instrumentos de trabajo. En rueda de prensa, destacó una inversión superior a 11,5 millones en el cambio de la flota entre 2012 y 2014, a lo que se suman otros casi 4,5 millones en la sustitución del mobiliario urbano. Su objetivo es que Sevilla esté limpia «las 24 horas del día y los 365 días del año». «Esta inversión la hemos podido realizar gracias a la contención de los costes y gastos, ya que mientras en el 2011 el presupuesto por transferencias municipales se elevó a casi 111 millones de euros, el año pasado fue de 87,8 millones de euros, lo que supone un ahorro de más de 23 millones de euros respecto al 2011», explicó el alcalde, mencionando el «compromiso de la plantilla, al incremento de la eficiencia y productividad obtenidos y a la contención de los costes».
Esa «contención» de los costes de explotación, en 3,6 millones de euros por debajo de los registrados en el 2009, han permitido en el 2013 obtener un resultado positivo en torno al millón de euros, según explicó el alcalde.
Lo que sí reconoció Zoido es que hay barrios, como Sevilla Este, a los que aún no llegaron las mejoras en el servicio de limpieza que está introduciendo Lipasam. En concreto, dijo que la empresa municipal de la limpieza tendrá presencia en todos los barrios de lunes a domingo y durante todo el día, algo ya implantado «prácticamente en toda la ciudad, salvo en Sevilla Este, donde está previsto que se haga a lo largo del mes de marzo». «Esto conlleva un gran esfuerzo de toda la plantilla de viaria ya que la totalidad de los trabajadores cambia sus turnos de trabajo e irán rotando», indicó.
Zoido destacó su apuesta por una Lipasam «profesionalizada, capaz de ser comparada con las empresas más competitivas del sector, con unos costes razonables, con calidad y orientación al servicio bien percibida por los ciudadanos, una óptima estructura de dirección y una productividad comparable a otras empresas del entorno europeo». «Una empresa de la que los sevillanos y sus trabajadores se puedan sentir orgullosos», insistió.
Lipasam está sustituyendo la recogida trasera de residuos por la lateral, un sistema «más productivo y eficiente, más cómodo para el ciudadano y que produce menor impacto visual». Para ello, se han incorporado cinco vehículos compactadores y está prevista la llegada de otros seis. Mejoró la dotación de mobiliario urbano de limpieza, con la adquisición de más de 5.200 contenedores de carga lateral, previendo sumar en 2014 otras 2.400 unidades; 3.540 papeleras y 158 vehículos nuevos. De ese total de 15.972.000 euros de inversión, 3,98 millones de euros se ha realizado en 2012; 3,78 millones en 2013 y 3,76 se emplearán en 2014.
La apuesta por los vehículos eléctricos Desde que el PP llegó a la Alcaldía, Lipasam está mecanizando sus servicios y apostando por los vehículos eléctricos, «atendiendo a los más exigentes criterios de sostenibilidad, eficiencia energética, disminución de emisiones de CO2 y ausencia de ruidos», según afirmó ayer el alcalde, Juan Ignacio Zoido. El primer edil detalló que en los últimos dos años se han incorporado 44 barredoras que han supuesto la renovación de parte de la flota, «que estaba en muy mal estado y con más de diez años de antigüedad», y se han incrementado los recorridos de barridos mecánicos y mixtos «considerablemente». Además de las barredoras, el parque de maquinaria destinado a la limpieza viaria ha renovado y aumentado su dotación con la incorporación de tres baldeadoras y cuatro vehículos eléctricos para limpiezas con agua a presión. Se han incorporado 30 motocarros térmicos y otros 12 eléctricos. El alcalde también destacó la adquisición de 12 triciclos eléctricos, dotados de carro de barrido para limpieza viaria, «con el objetivo de dotar de movilidad aumentada a los operarios». Además, explicó que «ahora se está trabajando, junto a una pyme sevillana, en el desarrollo de un prototipo».
