La empresa municipal de limpieza retiró el año pasado de las calles 608.000 muebles viejos tirados por sevillanos que no avisaron previamente al Ayuntamiento para que los recogiera. Lipasam califica a estos vecinos de incívicos y hace un llamamiento para evitar este tipo de prácticas.
Sólo un 7,7% de los sevillanos que dejaron sus muebles viejos en la calle el año pasado tuvo la deferencia de llamar antes al teléfono de atención al ciudadano del Consistorio para pedir que fueran a recogerlos de forma gratuita. Dicho en números: Lipasam retiró de la calle 659.000 enseres y tan sólo 51.000 se recogieron previa solicitud del usuario. El resto, 608.000, fueron abandonados en la vía pública.
Y, apostilla Lipasam en un comunicado remitido ayer, "en los últimos años el porcentaje [de los que avisan] ha ido disminuyendo, lo que pone de manifiesto la falta de colaboración progresiva por parte de los sevillanos". Lipasam por eso no duda en reprender a estos ciudadanos por lo que califica de "actitud incívica, en la que se perjudica a los residentes de la zona, ya que dificulta la prestación de servicios de limpieza de calidad y genera un gasto adicional a todos los ciudadanos".
La empresa que dirige Rafael Pineda se lamenta también de que los muebles sean dejados junto a los contenedores de basura, "generando un incremento de la suciedad en dichos puntos, además de una imagen negativa". Ante esta "falta de colaboración por parte de algunos ciudadanos", Lipasam hizo ayer un nuevo llamamiento para que los usuarios llamen al servicio de atención al ciudadano antes de dejar sus muebles tirados en la calle.
El servicio de recogida selectiva de muebles y enseres, puesto en marcha, en 1986, funciona de lunes a sábado de 7.00 a 14.00 horas mediante. El solicitante recibirá información del momento en el que se deben depositar los muebles en la calle, de donde Lipasam los retirará en un plazo inferior a 48 horas.
