Se trata de la campaña con el lema Un niño, un árbol, que tras el éxito de los años 2009 y 2010, el Ayuntamiento de Tomares retoma a través de su concejalía de Medio Ambiente, aprovechando la llegada de la primavera, para educar a los niños desde la cuna en el amor hacia la naturaleza y especialmente en el respeto por los árboles.
En el recién inaugurado parque del Camino de Villamanrique, 25 bebés que vieron la luz el año pasado y que fueron censados en Tomares, acompañados de sus familias, recibieron su árbol, a cuyos pies se colocó una placa con su nombre y fecha de nacimiento. Fue un emotivo acto que cuando sean mayores y vean las fotografías, agradecerán a sus padres y a su pueblo porque para siempre podrán tenerlo en la memoria.
Junto a los 25 árboles que se entregaron en esta primera remesa esta semana, 54 niños más los recibirán también la semana que viene (27, el martes, y otros tantos, el jueves, en sendas convocatorias previstas a las 18.00 horas y en el mismo parque). En total, son ya 250 bebés de Tomares los que tienen su árbol, desde que se puso en marcha por primera vez esta propuesta con una plantación el 5 de junio de 2009, coincidiendo con el Día Mundial del Medio Ambiente para celebrarlo de una manera más original.
"Que los padres estén contentos es nuestra mayor satisfacción", expresó la concejal de Medio Ambiente, Mercedes Fuentes. "No podíamos imaginar que la idea iba a gustar tanto a los padres", agregó la munícipe. Tal es así que, a pesar de que en estos dos años de experiencia 250 niños disfrutan ya de su árbol, siguen "teniendo una lista de espera de unos 40 menores más, a la que esperamos darle respuesta para la primavera", según prometió la edil, para lo que se están buscando nuevas ubicaciones en el municipio.