El premio Gordo de la Lotería de Navidad de este año, el 76.058, premiado con 400.000 euros al décimo, ha regado de millones la ciudad madrileña de Alcalá de Henares, en donde se han vendido 130 series del número, y se ha repartido por el resto de España, con otras 50 series premiadas en más de 70 localidades españolas de distintas provincias.
El sorteo arrancó a las 9.11 horas y el Gordo, pese a haber sido el primer premio en salir, se hizo esperar hasta la tercera tabla. A las 10.07 h., Ismael y Sherley, cantaron el primer premio -le siguieron un cuarto y un quinto premio-, y Adrián y Yassin, extrajeron las bolas.
Pese a estar muy repartido por toda España, donde más series se han vendido con diferencia ha sido en Alcalá de Henares, en donde se han conocido historias conmovedoras, como el caso de los 50 trabajadores de una fábrica en concurso de acreedores que se han llevado el premio. Algunos de ellos, los que continuaban trabajando en la fábrica, llevaban cinco meses sin cobrar. Uno de los premiados señaló a Europa Press que han jugado este número 23 personas de la plantilla actual, y que compran los décimos "siempre en la misma administración, pero no el mismo número". Tras cinco meses duros, la Lotería de Navidad le ha cambiado de un plumazo los planes y ya tenía preparado el "cava y la mariscada" para "celebrarlo a lo grande".
Premio Gordo para Alcalá de Henares, pero también para otras muchas localidades españolas, ya que el número se ha vendido en muchas partes de España como una tienda de chucherías de Castelldefels (Barcelona) o en la administración número 3 de Manises (Valencia), ya calificada de talismán, porque lleva cuatro años seguidos repartiendo premios importantes del Sorteo de Navidad.
En otras administraciones, como la número 2 de Burgo de Osma (Soria), los afortunados han tenido doble suerte: porque les ha tocado el Gordo y porque lo compararon en el último minuto. En concreto, el propietario de la oficina, Félix Melero, explicó que los tres décimos se vendieron en la jornada del viernes por la tarde.
Anécdotas de los que les ha tocado el Gordo y también de los que lo han rozado, como una pareja joven de Cádiz, que rechazó el mismo viernes el décimo premiado con el Gordo en el supermercado Eroski de Chiclana de la Frontera, ya que la mujer "no quería comprarlo en máquina".
Los dos se enteraron de que habían rechazado el Gordo mientras veían el sorteo, pero había alguien que ya el viernes, cuando ellos rechazaban el número, intuía que este sábado iba a tener un papel protagonista. Se trata de Adrián Castro, uno de los niños de San Ildefonso que tuvo la suerte de extraer el número agraciado con el Gordo, y que aseguró que la noche anterior soñó que sacaba el primer premio. Le falló el cuándo: soñó que extraía el Gordo en el primer alambre de la tercera tabla y lo ha hecho en el segundo alambre. También Yassin aseguró que estaba convencido de que lo iba a cantar, aunque no lo había soñado. Sus compañeros no los recibieron con collejas sino con abrazos.