El Betis ha descendido y el beticismo no sabe muy bien qué pensar de lo que le espera ahora. Para Rafael Gordillo, ex jugador y mito del club verdiblanco, está claro:Lopera, Lopera y más Lopera. 'Si él hubiese querido, tendríamos un equipo grande', dice el zurdo del Polígono.
'Ahora, por lo que dice Lopera y por otras cosas, somos el hazmerreír de toda España', lamenta
Gordillo, que el 15-J piensa acudir a los pies de la Giralda para manifestarse junto a miles de béticos que desean expresar su descontento por la actual situación de las cosas. 'Yo voy, Betis', lo dice Gordillo.
-¿Se cree usted ya que el Betis está otra vez en Segunda?
-Poco a poco. Parecía que este año iba a tener menos problemas. Tampoco se veía un equipo puntero para disputar nada, pero sí para pasar menos fatigas que estos tres años. Sin embargo, veías que se complicaba la cosa y que no se reaccionaba, y por desgracia tuvimos que jugárnosla en el último partido. Esta vez en casa, ante tu afición, contra un equipo malo, tan malo como nosotros? No pensaba que el Valladolid pudiera sacar su objetivo. Era un partido del Betis y la afición. La afición se comportó y el equipo no estuvo a la altura.
-¿Y cómo se quedó?
-Te duele. Tú has sido futbolista, has estado siempre en ese campo, te acuerdas de cómo te han tratado y ahora ves a los béticos llorando. Yo me quedo como ellos, parado. ¿Te lo crees o no te lo crees? Y después te viene la rabia de que nos han avisado tres veces y te viene esa impotencia de pensar ¿no hay nadie? Bueno, sabemos que hay alguien, el señor Lopera. Y Lopera ve que el primer año el equipo va tieso. Él no tiene que ver nada, pero lo que pasa es que lo ve todo. Si se dejara guiar por personas y por una secretaría técnica a la que de verdad hiciera caso, porque le hará caso en la mitad de las cosas o en menos de la mitad, entonces no habríamos tenido este problema. Y si él hubiese querido, habríamos hecho un equipo grande, porque tenemos afición, masa social, y los béticos somos de otra casta, de otra especie. Esto le pasa a otro equipo y se hunde. Nosotros seguimos. Con muy poquito que hubiese delegado, el Betis no estaría donde está ahora.
-¿Lopera no quiere un Betis grande?
-No es eso, es que él ha nacido así, se tiene que meter en todo, no puede estar quieto. Hemos ganado títulos, hemos descendido y hemos ido a la Champions, pero el trabajo siempre es el mismo. Ha habido personas a las que ha hecho más caso, como Eusebio Ríos, a lo mejor Serra Ferrer, y se ha trabajado un poco mejor, pero él siempre se mete, no puede estar al margen. Ni nosotros le sacamos cosas. Reyes tuvo que viajar a Argentina para ver a Casas, al que no queríamos fichar sólo por vídeos, y el agente tuvo que pagar el viaje de Reyes porque Lopera no quería. Él quería fichar a Ojeda, el grande del Numancia, y a Manel, del Espanyol. Si no le dices nada, tira para delante.
-¿Y por qué cree que no quiere irse del Betis?
-En Burgos ya dijo que se iba. En el ascenso de Jaén se puso malo, pero no estaba malo, se hizo el malo. Y dijo que se iba. Pero cuando llegamos al Ayuntamiento le cantaban 'Lopera quédate'? eso es lo que le gusta a él. Se apostaban conmigo que se iba y yo siempre decía que Lopera no se va. Ahora es lo mismo. Es lo que nos ha tocado. Si se pusiera las pilas e hiciera caso a la secretaría técnica... Puede haber un jugador que gusta, y Lopera dice que no lo puede pagar. Pues vale, tenemos cuatro más. Pero que no firme él, porque igual tiene más futbolistas que la secretaría técnica y negocia por detrás con sus agentes. Eso no es llevar un club. Que lo quiere llevar así, pues que se atenga a las consecuencias.
-¿Lopera no aprende de sus errores?
-Lopera no puede aprender de sus errores, es imposible. Y cuando se muera, se morirá así. Nació así y va a morir así. Está a tiempo para cambiar, pero ahora lo tiene más complicado porque hay mucha gente en contra de él.
-¿Hay béticos capaces de organizarse y plantear una alternativa a Lopera?
-Una vez estuve con Luis Castel para otra causa, cuando él estaba con ese tema, y hablamos. Es el único que me dijo que estaba negociando con Lopera y que tenía el dinero y se lo ponía en lo alto de la mesa. Por cierto, me debe una comida porque le dije que seguro que Lopera no vendía. Después salió lo de Betis Sport, lo del árabe? Sé que hay grupos que a lo mejor pueden comprarlo, porque se están moviendo. Otra cosa es que venda.
-¿Le gustaría volver a trabajar para el Betis?
-Yo he nacido allí, es mi segunda casa y puede ser, pero depende de qué, cómo y con quién. Con la edad que tengo y lo que he hecho en el Betis, no estoy para que salgan mal las cosas y me silben los aficionados del Betis. Para mí sería lo más fuerte que me habría pasado en mi vida.
-¿De verdad cree que los béticos le silbarían?
-En el fútbol pueden pitar a cualquiera. A cualquiera.
-El Betis siempre ha despertado simpatía. ¿Qué cree que inspira ahora?
-Ahora, no sólo por las cosas que dice Lopera, sino porque hay otras cosas y se hacen vídeos, somos el hazmerreír de toda España. También puedo echar la culpa a la afición, a las aficiones en general. Cuando el Betis está bien y fuerte, la afición se vuelve más exigente. Si viene el Barcelona y estás jugando mal, a los 10 minutos ya te silban. Antiguamente se llevaban todo el tiempo animando y ganando partidos. Les pasa a todas las aficiones. Yo siempre digo que una de las aficiones más frías y exigentes es la del Real Madrid.
-¿El descenso quizás puede ayudar a que el Betis recupere su antigua imagen?
-Lo mejor que le puede pasar al Betis es subir a Primera, que es donde tenemos que estar, aunque seamos más odiosos o menos simpáticos. Eso da igual, pero que estemos en Primera.
-Hay gente que piensa que el descenso podría ser un punto de partida para empezar de cero.
-Que se olviden de eso los béticos. Algunos decían 'yo firmo bajar y que se vaya Lopera'. Yo no se lo aconsejaría a ningún bético. La Segunda no la quiere nadie. Ahí están el Sporting, el Celta a punto de irse a Segunda B... Yo no quiero que le pase eso al Betis. Si hay que arreglar algo, que se arregle, pero no por bajar a Segunda.
-Además, Lopera no se va.
-Mi opinión es que no, aunque yo le pido que lo arregle de verdad por sus béticos, a los que él quiere tanto. Pero como lo veo imposible, que se vaya y diga a los béticos 'señores, lo voy a hacer por ustedes, perdonadme o felicitadme por lo que haya hecho', porque también ha tenido aciertos. Sería una manera digna de irse. Que se lleve bien con sus béticos. El ciclo de Lopera ha terminado.
-¿El Betis habría bajado sin Lopera?
-Sí, puede ser. Cualquiera puede descender. El fallo es que han sido tres años, nos han dado demasiadas oportunidades.
-Hay béticos que proponen no renovar el carnet para castigar a Lopera. ¿Eso vale de algo?
-¿Qué pasaría si los béticos no nos sacásemos el carnet y Lopera se quedase solo, sin afición ni consejeros? Porque muchos consejeros también podrían dimitir. No lo sé. ¿Cómo es lo del Liverpool? Nunca caminarás solo. Nosotros tenemos el manque pierda. El lunes, dos chavales me pararon y me dijeron 'hay que ver qué lástima, pero lo malo es que tenemos que sacarnos el carnet'. Eso es el Betis. El bético no va a dejar solo al Betis
-Además, subir sin la afición parece complicado.
-Es imposible. Alguno habrá que no se saque el carnet, pero la afición seguirá ahí porque los béticos somos de otra raza.
-¿Irá el 15-J a manifestarse?
-Sí, yo voy, soy bético y me manifestaré como bético.
