Los Aceituneros celebran 50 años paseando Columna y Paz por las calles de Utrera

Era como cada año, pero en el ambiente se respiraba un ánimo diferente. Los cofrades sabían ayer que éste no iba a ser un Miércoles Santo más, porque la hermandad de los Aceituneros está conmemorando su cincuentenario fundacional.

el 31 mar 2010 / 18:39 h.

Claveles blancos y azahar para la Virgen de la Paz y claveles rojos para Jesús Atado a la Columna exornaron los pasos de esta cofradía que marca el ecuador de la Semana Santa utrerana.


Largas filas de nazarenos, con casi 600 hermanos vistiendo las ropas blancas de la cofradía, acompañaron a sus dos titulares desde el instante en que, una vez más, el milagro se produjo y permitió la salida de ambas andas procesionales tras las necesarias maniobras de los costaleros para salvar las dificultades que presenta la puerta del Perdón de la parroquia de Santa María de la Mesa. La torre-portada de este templo, presidiendo la ciudad, sirvió de vigía al paso de la hermandad por su barrio hasta que, ya de regreso, se vivió otro de los momentos destacados de la Semana Santa de Utrera cuando, en la calle Rodrigo Caro, cuesta arriba, las muchísimas personas que llenaban la zona tomaron los adoquines y cangrejearon mientras miraban el bello rostro de la dolorosa del Miércoles Santo utrerano.

Aunque los Aceituneros han reservado sus estrenos para la salida extraordinaria que realizarán en septiembre, ayer pudo escucharse una de las dos nuevas marchas con las que cuentan los titulares de la corporación religiosa: Jesús flagelado, escrita por Juan Francisco Núñez, e interpretada por la banda de cornetas y tambores de la Vera-Cruz de Utrera. También la hermandad de la Quinta Angustia quiso felicitar a la cofradía aceitunera por esta efeméride y, antes de la procesión, le hizo entrega de un obsequio conmemorativo.

En el desfile penitencial de ayer, igualmente, estuvieron presentes los representantes de la Policía Local -cuerpo nombrado recientemente como hermano honorario-, así como el vicario general castrense y miembros de la base aérea de Morón de la Frontera, dada la vinculación que esta cofradía tiene con el Ala 21 de dicha base.

Con la cofradía en la calle, y viendo el gran número de pequeños nazarenos que ayer vistieron su túnica, los Aceituneros se consolidan como una de las corporaciones religiosas con mayor auge, gozando de una salud espléndida que volvió a contar con el cariño de utreranos y visitantes que arroparon en masa el discurrir de la hermandad por las calles y plazas de Utrera.

  • 1