Los administradores concursales del Real Betis, Antonio Jesús González, Francisco Tato y Gerardo Narbona, han señalado hoy que la deuda del club "puede estar entre los 60 y los 90 millones de euros".
En conferencia de prensa, Francisco Tato ha dicho que confía en que (la deuda) "esté en torno a los 65 millones porque, por ejemplo, hay catorce millones con Hacienda en los juzgados y se puede pensar que la resolución será favorable al Real Betis".
Así, la conclusión de Tato es que "si antes la viabilidad estaba garantizada, ahora que la cantidad es algo inferior, la perspectiva es mejor".
En la comparecencia ante los medios de comunicación, los administradores concursales han "explicado los cambios" de su informe definitivo, presentado a final de febrero, "con respecto al informe provisional" después de que 13 de los 248 acreedores realizaran algunas impugnaciones.
Antonio Jesús González ha explicado que "en cuanto al activo, hay una modificación a la cifra de 238 millones de euros. Tras una serie de valoraciones se cifra en 175 millones el activo y el pasivo ha sufrido una serie de alteraciones irrelevantes" debido a que "han sido mínimas las incidencias, lo que ha allanado el camino".
Según Francisco Tato, el pasivo se calculó "en el informe provisional en 84.245.658,44 euros pero en el definitivo es de 75.105.246,89 como consecuencia de los cambios operados".
Entre estos cita una disminución centrada en "Hacienda, más de seis millones, un millón de euros al ayuntamiento de Sevilla por prescripción de deuda tributaria y la reducción de la deuda por unos pagarés que fueron rescatados por el Real Zaragoza".
Por su parte, Gerardo Narbona ha explicado que "se acaba ahora la fase común del concurso y empieza la fase de convenio, que es decisiva" pues considera que "la entidad tendrá que presentar una propuesta que deberá ser aceptada por los acreedores".
Narbona cree que esta propuesta "se llevará a cabo a mediados de mayo" y que se "baraja un plazo de diez años" para liquidar la deuda que, "con los acreedores ordinarios, que son sobre todo los futbolistas, se sigue confiando en una quita del 50 por ciento y una espera de ocho años, con una carencia de dos años si se baja a Segunda".
Esta deuda asciende "a 39 millones y se espera que la quita sea de unos 20", y aunque ha reconocido que "a nadie le gusta que le toquen el bolsillo, de momento no se han encontrado dificultades irresolubles. No más de las habituales".
"Con Hacienda ya hemos tenido cuatro o cinco reuniones, se sigue hablando pero no se ha cerrado el convenio especial. Una vez aprobado el convenio, se rendirán cuentas y hasta ahí llega nuestro control. No descartamos la quita en Hacienda, pero en los créditos ordinarios y supeditados, no en los créditos privilegiados", ha añadido.
