La Asociación de Madres y Padres de Alumnos (AMPA) del colegio Juan XXIII se reunió con la alcaldesa, Carmen Tovar (PSOE), para tratar los desperfectos recogidos por técnicos municipales y de la Junta en el colegio. Los más de 200 alumnos no irán a clase hasta que compruebe que el centro es "seguro".
Desde el pasado miércoles, los 220 alumnos de educación Infantil y Primaria del Juan XXIII no van a clase. Y seguirán sin acudir hasta que sus padres estén seguros de que no corren peligro. La AMPA reclama desde hace seis años mejoras en el colegio y se rebelaron el pasado 30 de mayo, cuando se desplomó un portón de hierro de 80 kilos a escasos centímetros de la puerta principal del colegio.
El informe que realizó el arquitecto municipal mostró que "las vallas están oxidadas, las persianas se encuentran en mal estado, hay losas sueltas y existen filtraciones de aguas residuales", lee Carlos Rodríguez, portavoz del Ampa. Además, el ente público de Infraestructuras y Servicios Educativos de la Consejería de Educación de la Junta elaboró otro informe y arreglará, entre otros, la cubierta de un aula con goteras, sustituirá la puerta de acceso al centro y repararán las barandillas "ya que no cumplen la normativa". El presupuesto: 30.000 euros.
"Eso son sólo los desperfectos visuales!", matiza Rodríguez, ya que los padres aseguran que "el edificio tiembla" La alcaldesa replicó que si es cierto, "cerraría el colegio", por lo que hoy se solicitará "un informe de carga para comprobar que el centro actual reúne las condiciones óptimas" de seguridad, indicó el Consistorio. Del su resultado depende que los padres decidan llevar o no sus hijos al colegio.
Fuentes municipales aseguraron la semana pasada que el Ayuntamiento no cuenta con "dotación económica" para construir un nuevo colegio, como se comprometió mediante la firma de un convenio en marzo de 2007. Además, indicaron que tienen un "compromiso verbal" con el delegado provincial de educación para que la Delegación se haga cargo de la construcción en 2010. Los padres saldrán pronto de dudas, ya que Tovar citó a los padres con el delegado el próximo 10 de junio.
