El tiempo que hay que esperar antes de ser atendido en la consulta del médico sigue siendo lo peor valorado por los andaluces del sistema sanitario público. El promedio de esta espera es de unos 15 minutos para el usuario que concertó cita previa y de 20 para el que va sin cita, según datos de la Junta. Sin embargo, la consejera de Salud, María Jesús Montero, reconoció que este tiempo "puede alargarse incluso hasta una hora" en los centros de salud, a pesar de que la Junta siempre insiste en que los ciudadanos hagan uso de la atención primaria para no colapsar las urgencias de los hospitales.
Son resultados que se extraen de la encuesta de satisfacción sobre la sanidad del año 2009, que hace una radiografía de la opinión de los ciudadanos para saber las áreas que hay que mejorar. La encuesta, realizada por el Instituto Estudios Sociales Avanzados de Andalucía, fue presentada ayer por la consejera, quien afirmó que lo que más les "llena de orgullo es que los ciudadanos siguen valorando a los profesionales como la parte más importante del sistema sanitario público andaluz". En 2009 se entrevistó a 39.497 usuarios de la sanidad pública, atendidos en 1.114 centros entre hospitales, centros de especialidades y centros de atención primaria.
En general, los andaluces están satisfechos, en un 90% en la mayoría de los indicadores, con la labor que realizan los profesionales de la sanidad. Los que mejor valoran el sistema son los usuarios más mayores, a diferencia de los jóvenes, más exigentes y con una opinión desfavorable al respecto. Por sexos, los hombres se muestran más satistechos y confiados que las mujeres en su estimación del sistema sanitario.
Uno de los objetivos de la encuesta es mejorar los aspectos peor valorados, como la atención al usuario en el centro y la accesibilidad telefónica a la hora de coger citas con el médico de familia. Este aspecto mejoró un 4% gracias al teléfono de Salud Responde y las citas a través de Internet. El perfil del usuario que utiliza la red es el del trabajador, entre 35 y 50 años, más utilizado por hombres.
Otro hándicap del sistema sanitario es que no dan suficiente información a los usuarios sobre sus derechos, ya que sólo 4 de cada 10 andaluces los conoce. De hecho, el 61,5% de los ciudadanos los ignora. Por ejemplo, sólo uno de cada dos usuarios sabe que puede elegir otro centro cuando estima que el suyo no está a la altura. Como novedad este año, la encuesta introdujo la opinión de los ciudadanos en la atención recibida por las urgencias a domicilio, que tienen un promedio de espera de 11 minutos, es decir, el tiempo en que la vida corre peligro.
Ojo con el calor y los ansiolíticos
De las cinco personas fallecidas en Andalucía en lo que que va de verano por golpes de calor, varias presentaban un criterio común: la toma de ciertos medicamentos que aumentan la temperatura. Se trata de antidepresivos y tratamientos para personas con enfermedades mentales. La consejera de Salud reconoció que hasta ahora habían desarrollado estrategias con mayores y niños. Sin embargo, no habían tenido en cuenta al colectivo que toma esos medicamentos, con el que hay que tener un especial cuidado y del que hay un listado en la web de la consejería.
El plan de verano permite extremar las medidas de alerta, con el que se han realizado 7.444 llamadas telefónicas a los colectivos más vulnerables como enfermos o personas que viven solas. No obstante el número de fallecidos es similar a otros años. Ha habido víctimas mortales en Córdoba, una en Almería, otra en Córdoba, en Jaén y en Málaga.
