Las bancos y cajas que la próxima semana sellarán con la Junta el convenio de financiación de vivienda protegida se comprometerán a dar créditos del 80% del precio de la VPO. El Gobierno se asegura así que las entidades no cierren el grifo a compradores y promotores -también se fijan los préstamos para ellos- de pisos asequibles.
El próximo miércoles, el presidente andaluz, Manuel Chaves, firmará con las 31 entidades que sellaron el Pacto por la Vivienda en diciembre de 2007 un convenio para asegurar la financiación de los pisos protegidos que la Junta incluye en el Plan Concertado de Vivienda y suelo 2008-2012. Las cajas y bancos -que aportarán 9.550 millones- se comprometerán a dar préstamos del 80% del precio máximo de venta de la VPO y tendrán dos meses de plazo para aprobar o denegar el crédito.
Con este acuerdo, el Gobierno andaluz quiere garantizar que sus previsiones sobre construcción de vivienda protegida no van a verse afectadas por la crisis, después de que algunos bancos hayan cerrado el grifo a compradores y promotores de VPO. Esta misma semana, el Defensor del Pueblo, José Chamizo, ha presentado una queja de oficio para que las administraciones aprieten las tuercas a las cajas y bancos.
El documento, al que tuvo acceso Europa Press, establece que los préstamos a los promotores "serán igual al 15% de precio máximo de las viviendas". El plazo de amortización del crédito podrá alcanzar los 25 años "o ser mayor, previo acuerdo con la entidad correspondiente". Otro punto que estaba en el aire era el tipo de interés al que se concederán los créditos. El borrador dice que será el mismo que fije el Plan Estatal de Vivienda, una vez que el Ministerio cierre un convenio con las entidades a nivel nacional.
Las cajas y bancos que el miércoles se harán la foto con Manuel Chaves se comprometen también a dar préstamos a los andaluces que soliciten cualquier actuación regulada en el Plan Estatal y que se hubiera quedado fuera del acuerdo de financiación del Gobierno central y las entidades.
Visto bueno de la Junta. El documento incorpora una garantía de control por parte de la Junta. La Consejería de Vivienda deberá dar, en 15 días, su visto bueno a los préstamos antes de la formalización de los mismos, y tras haber recibido de las entidades toda la información al respecto. Por su parte, el banco o la caja contará con dos meses para aprobar o denegar el crédito y si decide rechazarlo "deberá comunicar los motivos" a la Junta.
En el contrato de financiación tendrá que quedar claro que la entidad "no aplica ninguna comisión por el préstamo". Además, el texto fija en 1.500 euros la cantidad mínima de dinero que el cliente aportará de forma adicional para liberarse de cuotas de su hipoteca.
Los firmantes del convenio formarán un grupo de trabajo, que elaborará un manual para la gestión de las ayudas financieras que facilite el intercambio de información entre la administración autonómica y las entidades. También se creará una comisión de seguimiento -en la que participarán la Junta y las entidades- que resolverá las incidencias del Plan Concertado de Vivienda y Suelo y evaluará su ejecución.
