El presidente de la Junta, José Antonio Griñán y la consejera Mar Moreno, ayer, en el colegio Manuel Giménez Fernández.
Los colegios de las zonas más marginales del Polígono Norte -que acogen alumnado del núcleo chabolista de El Vacie-, de Tres Barrios, de las Tres Mil, de Macarena y de Torreblanca han decidido custodiar los ordenadores portátiles de sus alumnos dentro de la escuela, en lugar de entregárselos para que los lleven consigo a casa, como estableció la Consejería de Educación. El programa Escuela TIC 2.0 deja claro que el niño puede llevarse el ordenador -se les entrega con una mochila trolley- porque es propiedad suya y no del centro escolar.
Pero los profesores de estos barrios pensaron que "los portátiles son más útiles dentro de la escuela que en sus casas". "Algunos de nuestros alumnos viven en chabolas, otros no tienen luz en casa, otros aún no saben leer en 5o de Primaria y muchos no han aprendido a valorar la propiedad y, como ocurrió con los cheque libros, podrían romperlos, cambiarlos por algo que les sea más útil ahí fuera o venderlos para ganar dinero", explica una de las profesoras del Polígono Norte.
Uno de los objetivos fundamentales de generalizar las nuevas tecnologías en la escuela es "garantizar la igualdad de todos". Lo recordó ayer el presidente de la Junta, José Antonio Griñán, al presentar los nuevos portátiles en la visita a un colegio del Polígono Sur, el Manuel Giménez Fernández. Pero las circunstancias socioculturales y económicas de algunas familias han obligado a ciertos colegios a relativizar esa igualdad. "Si le damos un portátil a un niño que sufre trastornos graves de conducta, podría destrozarlo o hacerse daño", dice una maestra de Rochelambert.
La otra razón para custodiar los ordenadores es la seguridad del alumno. Los colegios consultados consideran que al permitir que un niño se lleve el portátil a casa en una zona tan problemática estarían poniendo en peligro su integridad física.
"No puedo dejar que un niño de 10 años salga con un portátil y se vaya andando hasta las Tres Mil o hasta Los Pajaritos. Le pegarían y le robarían en la primera esquina", explica un profesor de Tres Barrios. En este caso, incluso las familias pidieron a los profesores que se responsabilizaran de los ordenadores de sus hijos.
Los colegios pidieron permiso a Educación, por escrito y verbalmente, para retener los ordenadores. El ultraportatil está pensado para que el alumno lo use dentro y fuera del aula, para que haga en casa las tareas de la escuela usando la pantalla del PC en lugar del cuaderno.
Pero estos centros pidieron que el uso del portatil se limitara exclusivamente al aula, algunos incluso propusieron dejar el centro abierto por la tarde para que los niños volvieran a usarlos. En un principio, Educación se negó y les respondió que la medida era "ilegal" y que "los portátiles eran propiedad de los alumnos".
Pero la semana pasada, según fuentes de la Inspección, se incluyeron nuevas reglas para la Escuela TIC 2.0: "En circunstancias especiales, el consejo escolar, a petición de la familia del alumno, podrá tomar la determinación que mejor garantice la disponibilidad del portátil para la formación del alumnado".
Fuentes de la consejería aseguraron ayer que el colegio que quiera custodiar los PCs debería documentar sus razones e incluirlo en su reglamento de centro, y que esto "sólo tendrá un tratamiento excepcional en zonas de intervención socioeducativa".
Todos los alumnos de 5o y 6o de Primaria han recibido un portátil -173.000 en Andalucía-, en los que la Junta y el Gobierno central han invertido 80 millones. Los niños pasarán con su ordenador a ESO y lo conservarán cuando obtengan el graduado.