El Sevilla ha puesto fin a su racha de derrotas gracias a la mejoría de su nivel defensivo, al desacierto del Villarreal y, sobre todo, al 'regreso' de sus dos grandes estrellas: Frederic Kanouté y Luis Fabiano. Sin su aportación goleadora, el equipo sólo ha logrado ganar cinco partidos en esta Liga.
Por muchos futbolistas que han llegado al plantel en los últimos tiempos, ninguno ha sido capaz de hacer sombra a dos de los mejores delanteros que han pisado el césped del Sánchez Pizjuán en las últimas décadas: Kanouté y Luis Fabiano. Su peso específico es tal que cuando no juegan o no aparecen marcando goles se nota. Y de qué manera. De los 34 encuentros de Liga que lleva disputados el Sevilla esta temporada, sólo cinco terminaron en victoria sin que alguno de los dos marcase. Este dato pone de manifiesto la enorme importancia que tienen sus goles. El último ejemplo se vio el pasado sábado en El Madrigal, donde dejaron claro que hoy por hoy son imprescindibles.
A tierras levantinas llegó el Sevilla con una racha de cuatro derrotas consecutivas y de allí se marchó con una victoria crucial en el bolsillo gracias al regreso de Kanouté y Luis Fabiano. Tanto el franco-malí como el brasileño habían sido incapaces de marcar en los cuatro partidos anteriores (Getafe, Valencia, Barcelona y Real Madrid) y el equipo lo había pagado muy caro: cuatro derrotas. Lo suyo ha sido aparecer, marcar y cambiar la dinámica.
Esta última mala racha guarda cierta semejanza con uno de los momentos más delicados en la presente campaña. Allá por el mes de enero, Racing de Santander, Sporting de Gijón y Betis complicaron las cosas al equipo -y a Manolo Jiménez- pese a ocupar el tercer puesto de la clasificación. En esos tres partidos, sólo Kanouté -frente al eterno rival- vio puerta, aunque en vano, ya que su gol no sirvió para sumar puntos. La escasa aportación de los dos delanteros fue clave.
Pese a la derrota, el gol de Kanouté al Betis representó el inicio de lo que sería su espectacular serie anotadora, que se prolongó hasta la visita al Recreativo (11 goles en ocho partidos) y que secundó Luis Fabiano con dos tantos. Hasta siete encuentros seguidos sin perder (seis victorias y un empate) llegó a encadenar el Sevilla desde que cayó ante el eterno rival. Gracias a este bagaje alcanzó su máxima renta de puntos sobre sus rivales en la lucha por una plaza en Liga de Campeones. Una renta que, hoy día, pese a ser menor, todavía le permite ocupar una posición privilegiada.
Gran parte de la culpa de estos excelentes resultados la tuvo Kanouté. Entre sus goles y los de Luis Fabiano, Jesús Navas y Renato, el Sevilla tumbó consecutivamente al Espanyol, Atlético de Madrid, Athletic, Almería, Valladolid y Recreativo, además de llevarse un empate de Málaga.
Sin embargo, con la posterior desaparición de los dos delanteros el equipo volvió a desaparecer nuevamente. Desde el último parón liguero, el Sevilla fue otro. Ganó al Recre en un partido que también pudo perder y luego comenzaron a llegar las derrotas. La primera, ante el Getafe, al que pudo golear de haber tenido un mínimo de acierto. Luego llegaría la pifia ante el Valencia, el repaso a manos del Barcelona y el nulo intento de frenar al Real Madrid.
Ahora, con el enésimo regreso de la dupla atacante, el Sevilla también ha regresado. Entre Kanouté y Luis Fabiano suman 25 goles en esta Liga, es decir, casi el 50% de los que lleva el equipo (48), que sólo ha perdido tres partidos con estos dos futbolista jugando juntos.
