La cantera de Las Majadillas, denunciada desde hace años por daños el medio ambiente, llegará a oídos del Defensor del Pueblo Andaluz. Los ecologistas de Alwadi-ira acudirán a José Chamizo tras denunciar la falta de información de la Junta para conocer la viabilidad y legalidad de este proyecto.
Los miembros de esta entidad alcalareña aseguran que llevan tres años solicitando a la Delegación Provincial de Innovación, Ciencia y Empresa de la Junta de Andalucía que les permita ver el expediente de la cantera Las Majadillas, sin que hayan recibido por ahora ningún documento.
Ante esta situación, Alwadi-ira ha presentado una queja al Defensor del Pueblo Andaluz para que inste a la Administración andaluza a aportar datos sobre esta cantera de albero, cuya explotación ha causado, a su juicio, daños en el paísaje, destrucción de yacimientos arqueológicos y hasta la disminución de caudal del manantial de Marchenilla.
Los ecologistas también inciden en que esta falta de datos se produce a pesar de que el 19 de octubre de 2007, la Consejería de Medio Ambiente les comunicó que había abierto actuaciones previas por el supuesto incumplimiento de la normativa vigente sobre protección ambiental.
Los ecologistas transmitirán al Defensor del Pueblo Andaluz que en los tres últimos años han presentado seis solicitudes para ver el expediente o documentos relacionados con la explotación de esta cantera. Asímismo, han solicitado los certificado que acrediten que esta expiotación es legal y las garantías de que la regeneración de toda la zona se llevará a cabo con las correspondientes especies autóctonas antes de abandonar la actividad minera.
Estudios . La asociación ecologistas teme que cuando acabe la explotación no haya posibilidad de regenerar la zona. Por ello, ha solicitado una revisión de la evaluación de impacto ambiental, en base a la nueva situación y prestando especial atención a las posibles afecciones sobre el medio hídrico, tanto superficial como subterráneo, en las inmediaciones y el subsuelo de la cantera. En esta revisión deberían participar un equipo multidisciplinar, formado por biólogos, geólogo, geógrafos y arqueólogos.
