-¿Cómo han sido los resultados de la economía social andaluza en 2007, que presentan hoy en asamblea?
-Han sido muy positivos. Hemos crecido, a pesar de que la desaceleración económica que padece todo el país comenzó a notarse a finales del pasado año. De hecho, hemos aumentado en un 20% el número de empresas y en un 15%, las ventas, donde rozamos los 11.000 millones. En ese sentido, las empresas de Cepes-A han cubierto las expectativas marcadas y hemos aumentado en un 10% el número de empleos. Además, hemos fomentado las relaciones institucionales, la innovación y la formación a través de nuestras dos fundaciones.
-¿Qué papel juega la economía social en una coyuntura como la actual?
-No me gusta nada igualar la economía social a tiempos de crisis, porque nosotros vamos a seguir trabajando igual para que nuestras empresas continúen creciendo. Los empresarios quieren las ganancias en época de bonanza y existe la idea de que las pérdidas hay que socializarlas. La economía social debe instalarse en aquellas firmas que vean que van a ser rentables a medio plazo.
-¿Qué sectores son los que tienden a utilizar esta fórmula?
-Los sectores tradicionales donde se ha desarrollado la economía social han sido los manufactureros, porque son más intensivos en mano de obra.
-¿Las cooperativas del ladrillo también sufrirán el parón?
-Yo mantengo el contacto con todas mis cooperativas, sobre todo las de construcción, por la coyuntura actual. Me dicen que si se reactiva el Plan de Vivienda antes del otoño, la crisis no les afectará, aunque si este plazo, que es el previsto, se retrasa, sí tendrá consecuencias para muchas de ellas.
-¿Padecen menos la desaceleración este tipo de firmas?
-Están igual de preparadas que las demás. Lo que sucede es que, al ser la base social más amplia, tanto las ganancias como las pérdidas se reparten de forma igualitaria y, de este modo, la carga es más liviana para afrontar momentos como el actual.
-¿Qué previsiones de crecimiento maneja Cepes-A para este ejercicio?
-En la actualidad, el incremento de empresas está situado en torno al 10%, una cifra que no está nada mal para lo que está cayendo. En cuanto a las ganancias, podrían crecer de un 8% a un 15%. El sector servicios está cobrando importancia en la economía social, ya supone el 50% de la facturación y el crecimiento va a venir por ahí.
-¿Qué importancia tiene el cooperativismo en una sociedad como la andaluza?
-Como leales representantes de la economía social, desde Cepes-A estamos trabajando para que crezca el número de personas que toman parte de su renta de esta forma de hacer empresa. Ahora son 600.000. Vamos a continuar con nuestro plan de difusión para dar a conocer esta fórmula en todos los lugares de la comunidad andaluza, porque es un sistema que tiene mucho que ver con nuestra forma de ser, lo que hace que seamos líderes en España en peso dentro de la economía global.
-¿Cómo va su despliegue por Iberoamérica?
-Hicimos una apuesta en su momento y nos ha salido bien. Estamos dando a conocer en esos países nuestra experiencia, para que se implante y sirva de motor de desarrollo para algunas zonas. En la actualidad, hay muchas empresas andaluzas que viajan hasta allí para ayudarles en la puesta en marcha de firmas con esta fórmula.
-¿Hay posibilidades de consolidar una gran corporación de cooperativas andaluzas, como se habla desde hace años?
-Hace tiempo que trabajamos en ello y queremos que sea así. Necesitamos en Andalucía buques insignia que sirvan de locomotora para tirar de las más pequeñas. Es la línea que hay que seguir, porque las distribuidoras son grandes y es la manera de competir en el mercado de tú a tú.
