Con bastante menos asistencia que la asamblea celebrada a finales del curso pasado, alrededor de 300 estudiantes de los 60.000 que hay en la Universidad de Sevilla han decidido sumarse a la huelga general del 14 de noviembre convocada por los sindicatos mayoritarios. Previamente, entre los días 8 y 12 de noviembre habrá un calendario de movilizaciones para intentar sumar a más estudiantes a la huelga general. Entre esas actividades se prevén clases en la calle.
Durante la asamblea el Consejo de Alumnos, máximo órgano de representación estudiantil, ha defendido la convocatoria de paro con la que se cerró el curso pasado. Según el CADUS, gracias a esa movilización, "hemos logrado que la subida de las primeras matrículas sea sólo de un 3% en Andalucía". "Claro que ha servido el paro", ha defendido Nerea de Tena, portavoz del CADUS. No obstante, varios estudiantes asistentes a la asamblea han reconocido cierto desánimo entre la comunidad estudiantil, lo que explicaría, según ellos, que el paro académico convocado para el 12 y 16 de noviembre no haya conseguido el respaldo de los centros y facultades de la Universidad de Sevilla. Tan sólo seis de los 25 existentes respaldaron esta propuesta. Hay incluso estudiantes que han alertado de la "mala imagen" que da convocar una asamblea y que sólo asista 300 de los 60.000 estudiantes que hay en la Hispalense.
