Emilio Gordillo, expulsado ayer de IU por la asamblea tras haber anunciado que estudia ser el candidato del PSOE, dejará de ser alcalde de La Luisiana y lo sustituirá Montserrat Delgado, actual primera teniente de alcalde. Pero para ello, IU, que ganó las últimas elecciones municipales por mayoría absoluta con siete de los 11 ediles posibles, deberá contar con el apoyo de tres concejales no adscritos, ya que uno de sus munícipes dimitió el pasado jueves y otro se está todavía pensando si firmar la reprobación del regidor aprobada por los militantes.
En este sentido, a la dimisión del titular de Turismo, Pablo López, se une que el concejal de Juventud, Deportes y Educación, José Antonio Arjona, no tiene claro si apoyará la moción de censura y aplaza su decisión hasta dentro de unos días. Eso sí, comunicó a sus compañeros que de no respaldar la reprobación aprobada por la asamblea, sí entregaría su acta de concejal.
De esta forma, sólo cuatro de los seis ediles de IU -excluido el alcalde- respaldan la moción de censura contra el regidor. Se les unen a estos cuatro los tres ex ediles del PSOE, que son no adscritos desde que, en junio de 2009, abandonaron la disciplina socialista por discrepancias con la dirección local y provincial. Éstos están dispuestos a apoyar la presentación de una moción de censura en el caso de que regidor se negase a abandonar voluntariamente la alcaldía, algo que ya confirmó el primer edil, quien sostiene que no dimitirá ni entregará su acta de concejal porque tiene que sacar adelante los proyectos del pueblo.
"Desde un punto de vista práctico sería una irresponsabilidad permitir que se mantuviera en la alcaldía después de haber perdido la confianza del grupo municipal que le apoya", argumentan los no adscritos, "una situación que le impediría sacar adelante sus propuestas y provocaría un colapso" en el funcionamiento del Ayuntamiento de La Luisiana que perjudicaría seriamente a los vecinos.
Igualmente, respaldan que la primera teniente de alcalde ocupe el cargo por estar en el segundo lugar en la candidatura. "Desde un punto de vista político y ético fue IU la que ganó las elecciones municipales y consiguió un apoyo por parte de los votantes lo suficientemente claro como para que no quepa duda alguna de que es la que debe gobernar". Eso sí, matizan que el suyo es un apoyo puntual a una situación excepcional. "Ni pedimos ni esperamos ninguna contraprestación a cambio de nuestro apoyo, sólo nos mueve, como no podía ser de otra forma, el sentido de la responsabilidad".
Por su parte, el todavía alcalde desafió a sus antiguos compañeros a presentar la moción de censura y criticó el apoyo de los ex socialistas, opuestos desde hace más de año y medio a la política del equipo de gobierno de IU. "Veremos cómo explican esta colaboración después de haber estado más de un año tirándose los trastos", se preguntó.
