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Los funcionarios conservan la extra de julio pero no evitan el tajo salarial

El Gobierno andaluz no paralizará el plan de ajuste, como anunció el vicepresidente Diego Valderas, pero retira el recorte de los pluses para que no se sumen a los de Rajoy

el 17 jul 2012 / 11:12 h.

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"El plan de ajuste no puede ni paralizarse ni retirarse". El Gobierno andaluz mantendrá el recorte salarial a los funcionarios, pero les devolverá íntegra la paga extra de julio. Los 261.000 empleados públicos ingresaron la paga de verano a finales de junio, como cada año, pero sabiendo que la Junta acababa de aprobar un plan de ajuste que les retiraría de forma prorrateada ese dinero de las nóminas posteriores. El arranque de ese proceso de recorte paulatino era inminente, por eso la Junta lo bloqueará modificando algunos artículos del plan de ajuste en un Consejo de Gobierno extraordinario a finales de esta semana, o en el del próximo martes. El tajo en la extra de julio suponía para un puesto base de funcionario del rango más alto un recorte de 80 euros menos al mes de media, que sumaría unos 480 euros de menos al llegar a diciembre.

Ahora el Ejecutivo andaluz ha decidido respetar la paga de julio, después de que el Gobierno central anunciara la eliminación de la extra de Navidad. Esto significa que los ajustes que vienen de Madrid y que coincidían con los que ya se habían adoptado aquí no se sumarán y, por tanto, no causarán un doble perjuicio al funcionario andaluz. A efectos cuantitativos, el recorte en la nómina no variará mucho (no está cuantificado si perderán más o menos), sólo que en lugar de aplicarlo la Junta en las pagas extra de julio y diciembre, lo asumirá íntegramente el Gobierno central eliminando la paga de Navidad. Del recorte en la partida de nóminas a los empleados públicos que recoge el plan de ajuste (747 millones), el tajo en la extra de verano ascendía a 140 millones, que ahora se podrán ahorrar.

Los funcionarios andaluces no se verán "doblemente castigados", como vaticinó el presidente José Antonio Griñán. Pero la decisión que adoptó ayer el Consejo de Gobierno no responde a lo anunciado hace dos días por miembros de la Junta y del PSOE-A, y mucho menos, colman las expectativas de los funcionarios. La Junta no "paralizará" el plan de ajuste, como había anunciado el vicepresidente Diego Valderas, y seguirá causando "un doble quebranto a los empleados públicos", como negó hace dos días el vicesecretario general del PSOE-A, Mario Jiménez. El Gobierno central y el andaluz meterán la tijera en los salarios públicos andaluces, cada uno en una dirección: el primero eliminará la paga extra de Navidad, y el segundo mantendrá el recorte de entre el 5 y el 10% a funcionarios e interinos. Las tijeras ni se cruzan ni se solapan, pero la caída de ingresos no variará mucho a lo previsto. "Retirar es una expresión que no se ha barajado hoy", confirmó el portavoz, Miguel Ángel Vázquez.

Con todo, las medidas aprobadas por el Gobierno el pasado viernes sí obligarán a modificar otros aspectos del plan de ajuste, que aún no han sido cerrados del todo. La consejera de Hacienda, Carmen Martínez Aguayo, discutirá la fórmula con los sindicatos de la Función Pública (CCOO, UGT y CSIF) entre ayer y hoy. Las medidas de Rajoy que afectan a los permisos por la incapacidad laboral transitoria y a los días de libre disposición forzarán la modificación del plan de ajuste sobre las vacaciones de los funcionarios andaluces, que también se habían visto reducidas.

El Consejo de Gobierno acordó ayer "dejar sin efecto" cinco artículos del plan de ajuste (el 7, 9, 10, 11 y 24), los relativos a la reducción de los complementos retributivos, que se traducían en una minoración de entre el 30 y el 40% de las pagas extra de julio y diciembre. El resto se mantiene igual: los funcionarios e interinos de la administración andaluza verán reducida su nómina entre el 5 y el 10% (los interinos, además, rebajarán su jornada laboral en la misma proporción que su salario (un 10%).

Sindicatos y patronal. El presidente Griñán se reunió ayer, por separado, con los líderes de CCOO y UGT, Francisco Carbonero y Manuel Pastrana, y con el presidente de la patronal (CEA), Santiago Herrero. Tanto los líderes sindicales como el portavoz de los empresarios llamaron a la unidad, cada uno con una fórmula bien distinta. Pastrana y Carbonero propusieron "un frente social" para defender los intereses andaluces contra las medidas del Gobierno central que suponen "un gran deterioro del Estado social" y el "acoso y derribo de las comunidades autónomas". Herrero, que se ha mostrado partidario de muchas de las medidas aprobadas por Rajoy, le propuso al presidente andaluz la constitución de una mesa para el impulso y el relanzamiento de la economía en Andalucía en la que estén presentes PP, PSOE e IU, UGT, CCOO y la propia CEA.

Sobre la recuperación de la extra de julio, Carbonero recordó que "siempre han pedido que se retire el decreto de la Junta" y, por tanto, "no van a estar en conformidad con ningún recorte a los trabajadores". Pastrana aseguró que su sindicato "no va a renunciar a que la Junta actúe de tal manera que ningún trabajador salga perjudicado más allá del decreto del Gobierno", informa Europa Press. Más contundentes estuvieron los sindicatos sectoriales, como CSIF y SATSE, que denunciaron sentirse "engañados" por el anuncio del vicepresidente de la Junta y del número dos del PSOE-A. Durante la reunión de los miembros del Ejecutivo andaluz, Valderas no pidió la "paralización" del decreto ley del plan de ajuste ni reclamó someter a consulta popular los recortes. Aún así, varios miembros de IU seguían anunciando ayer, en la red social Twitter, que la coalición había logrado que la Junta "paralizase" los recortes salariales a los funcionarios.

El plan de ajuste andaluz sigue conteniendo un recorte de 3.500 millones (mil en ingresos y 2.500 en gastos), de los que 747 salen de las nóminas a los funcionarios. Con el ajuste que viene de Madrid, la Junta considera que se ahorra tener que retirarle la paga de julio y diciembre a sus funcionarios. El ahorro se estimó en 315 millones que, según el portavoz, no habrá que sustituir con recortes en otras partidas. "De momento no se contemplan esfuerzos adicionales. No ha variado el compromiso de reducir el déficit público al 1,5% del PIB", dijo Vázquez. Griñán concluyó que las decisiones del Gobierno que afectan a los empleados públicos van encaminadas "a que, al final, se tengan que hacer recortes de plantilla, es decir, despidos de empleados públicos, lo que la Junta va a tratar de evitar a toda costa".

Diputados, alcaldes y concejales del PP renuncian a la paga de Navidad

La eliminación de la paga extraordinaria de Navidad a los funcionarios ha provocado una reacción en cadena en diferentes organismos andaluces gobernados por el PP que, voluntariamente, han renunciado a la misma. El presidente del PP-A, Juan Ignacio Zoido, anunció ayer que los diputados del grupo popular en el Parlamento no tendrán paga en diciembre. El portavoz del PP en la Cámara, Carlos Rojas, dirigirá un escrito al presidente del Parlamento, Manuel Gracia, informándole de esa decisión. En un comunicado, Zoido manifestó que son conscientes “del sacrificio que los andaluces están realizando y, con esta decisión, los diputados populares queremos trasladarles el mensaje de que los políticos no estamos al margen”. Son tiempos muy difíciles que nos exigen a todos responsabilidad y adaptarnos a medidas dolorosas pero necesarias y los diputados del PP queremos estar a la cabeza de esa exigencia”, afirmó. El presidente del PP andaluz recordó que “los ciudadanos demandan que los políticos nos apretemos el cinturón, como se lo aprietan las familias y las empresas”. Por ello, reclamó que, además de decisiones como la del PP-A, el Gobierno andaluz adopte medidas de austeridad y reformas encaminadas a lograr una administración más austera y con menos privilegios. El PP extendió su decisión al equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Sevilla, cuyo alcalde es Zoido, a la Diputación de Cádiz, a los concejales populares de Marbella (Málaga), al equipo de Gobierno y cargos de confianza del municipio malagueño de Rincón de la Victoria, el alcalde y concejales del Ayuntamiento de Jaén, así como la corporación municipal del Ayuntamiento y la Diputación de Almería, y sus cargos de confianza. También renunciaron los concejales, diputados nacionales y senadores del PP de Córdoba.

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