En concreto, se adjudicarán 51 huertos sociales entre todos los ciudadanos que lo hayan solicitado y que cumplan diversos requisitos. De este modo, los destinatarios de estas parcelas deberán estar en posesión del título de jubilación (excepto si es parcial). Igualmente, pueden tener cumplidos 65 años, no estar trabajando y no tener derecho a pensión de jubilación. También pueden ser menores de 65 años pero titulares de una pensión de incapacidad permanente en el grado de absoluta. De igual modo, estas personas deben ser residentes en el municipio y acreditarlo mediante certificado de empadronamiento. Los que resulten seleccionados podrán usar la parcela que les haya correspondido durante un periodo de cuatro años.
Los interesados deben recoger y presentar sus solicitudes en el Servicio de Atención al Ciudadano (SAC) del Ayuntamiento de Utrera , de 8.30 a 14.00 y de 16.30 a 19.00 horas, de lunes a viernes, mientras que los sábados puede hacerse de 9.30 a 12.30, según informaron fuentes municipales. Las solicitudes también están disponibles en las instalaciones de la concejalía de Agricultura y Medio Ambiente, ubicada en la calle Abate Marchena, junto a la estación de trenes, de 9.30 a 13.30, de lunes a viernes.
El sorteo de las 51 parcelas se celebrará el día 19 a partir de las 12.30. Tendrá lugar en las instalaciones del centro de día de la tercera edad.
Esta fase del procedimiento llega después de que el pleno del Ayuntamiento de Utrera aprobara una ordenanza reguladora sobre este recinto. El edil del ramo, Juan Bocanegra, se mostró muy satisfecho con el proyecto. "Estamos seguros de que se va a registrar un elevado número de demandas de estos huertos sociales, por lo que es absolutamente necesario que dispongamos de esta ordenanza para regular el funcionamiento de los mismos y su alternancia, así como la ampliación de esta experiencia a otros espacios libres que puedan quedar disponibles".
El concejal del PA destacó en la misma línea los beneficios de la horticultura, tanto físicos como emocionales, propiciando las relaciones entre las personas que se dedican a estas tareas "y ofreciéndoles una forma de invertir su tiempo libre tras la jubilación".
Estos huertos sociales son para la agricultora ecológica, es decir, permitiendo el cultivo de la tierra de forma respetuosa y sostenible, empleando productos que no dañen el ecosistema. Los adjudicatarios estarán comprometidos a devolver al terreno la materia orgánica extraída de las cosechas y a cultivar especies adaptadas al entorno. Por otro lado, se utilizará la menor cantidad de agua posible, aplicándola en el momento adecuado mediante un sistema de riego de elevada eficiencia, de manera que no se desperdicie nada y todo resulte muy sostenible para el municipio.