Una de las propuestas que la consejería va a incluir en el nuevo Reglamento Orgánico de los institutos será la "desaparición de determinados documentos que hasta hoy se le exigen al centro". Antes del inicio de cada curso escolar, los profesores y equipos directivos deben concentrarse en elaborar tres informes básicos: la Memoria informativa, el Plan anual de Centro y la Programación Didáctica. Sobre todo, los dos últimos son las líneas maestras del funcionamiento de un instituto: explican cómo abordarán el nuevo curso, los objetivos, cómo van a trabajar, cómo se distribuyen las clases, qué contenidos y metodologías por materias...
Hasta ahora, el Plan de Centro era anual, y ahora la consejería propone que sea "plurianual". La Programación Didáctica debía renovarse cada año, y ahora será "permanente". Por último, la Memoria no se remitirá en papel al servicio de inspección, sino a través del sistema informático de la consejería.
Educación ha plasmado estas propuestas por escrito en un "documento marco", que ahora deberá debatir y perfilar con toda la comunidad educativa, antes de incluirlo en el decreto de reglamentos de centro. Pero la decisión responde "al clamor del profesorado, y sobre todo de los equipos directivos", que se quejaban de que "desgastan mucha energía en temas administrativos" en detrimento de su trabajo docente.
seis departamentos. El otro pilar de la reforma que plantea Educación significará dar un vuelco radical a la estructura interna de los institutos, la misma desde hace décadas.
Hasta ahora los institutos contaban con 17 departamentos, uno por asignatura, y ahora habrá seis macroadepartamentos, uno por área de conocimiento: Lingüística; Lengua Extranjera; Matemáticas; Científico Tecnológico; Cultural, Artístico y Deportivo y Social y Ciudadanía. Los 15 departamentos de contenidos temáticos se refunden en estos seis, y sólo permanecen intactos los de Orientación y Atención a la Diversidad, y el de Actividades Extraescolares.
Ni la OCDE, que examina los resultados del informe PISA, ni el Gobierno español ni el andaluz evalúan a sus alumnos por los contenidos que han ido acumulando en su aprendizaje, sino por lo que saben hacer con esos contenidos. La aplicación práctica de lo que les han enseñado, lo que los pedagogos llaman "competencias básicas". Cada uno de esos seis departamentos define una competencia básica: conocimiento matemático, lingüístico...
Por último se crearán dos departamentos nuevos: el de Formación e Innovación educativa, que se encargará de detectar las necesidades de formación de sus compañeros, y se coordinará con los Centros de Profesores (CEP) para decidir si deben asistir a un curso a especializarse. Y el de Evaluación y Calidad, que por primera vez evaluará el trabajo de los profesores desde dentro, y se coordinará con la Agencia andaluza de Evaluación Educativa.
En apariencia habrá menos departamentos, aunque cada instituto puede, luego, decidir si crea sus propios departamentos. Los de Secundaria podrán añadir hasta tres más, y los de ESO y Bachillerato, hasta siete más. El dinero y la horas liberadas que Educación dedicaba a los 17 departamentos se mantiene, con lo que el director podrá usar el excedente de horas libres y de pluses económicos como convenga. "La consejería no se va a ahorrar ni euros, ni horas ni complementos".