Cuando Pepi Madueño nació, a Televisión Española aún le quedaban 18 años para emitir su primera señal desde el Paseo de La Habana, en Madrid. Ahora, esta pensionista de 72 años que vive sola tiene una chuleta que le ha preparado su hijo para poder manejar la TDT.
A Pepi le gusta viajar y tocar el piano, a veces también hace de canguro de sus nietos y todas las mañanas desayuna en la calle con sus amigas. Pero el día es muy largo para un jubilado y la televisión puede ser una buena compañía. Por eso Pepi se estudia bien los apuntes, porque ahora tiene que utilizar varios mandos a distancia: uno para el receptor de televisión, otro para la TDT, otro para el vídeo y otro para el DVD, porque ella es alumna aplicada y ya sabe "grabar las películas del fin de semana de Antena 3".
Sin embargo, Manuel, un jubilado de 80 años, no necesita apuntes. Él pregunta a sus nietas una y otra vez hasta que consigue aprender de memoria todo lo que quiere saber. Y le da resultado, porque Manuel, que dejó el colegio con 11 años, se desenvuelve estupendamente en internet y utiliza el correo electrónico para comunicarse con sus amigos y para pedir cita con su médico de familia.
Estos dos sevillanos aseguran tener la mente despierta porque les encanta ver Pasapalabra (Telecinco), La ruleta de la fortuna (Antena 3) y Saber y ganar (La 2), aunque Pepi reconoce que Sálvame también le distrae mucho, pues "a mi edad no me gusta ver cosas tristes".
Sin embargo, el resto de mayores que este periódico ha entrevistado se decanta por Canal Sur, como María (73 años), que vive con su marido y un hijo, que es el que los pone al día sobre la nueva televisión que llega. Al igual que a Rosario (74), a la que el programa de la cadena pública andaluza Se llama copla la vuelve loca, y detesta el espacio de Telecinco Sálvame porque "no está bien que se lleven comiendo todo el rato".
Rosario también vive con su marido y un hijo, "que es el número uno en ordenadores", pero ella no tiene problemas porque en casa hay un plasma con la TDT incorporada. Lo mismo le ocurre a María de los Ángeles (76), que ya tiene "su televisor preparado para ver a Juan y Medio y los cotilleos".
Manuel Trasierra, de 67 años, también tiene un televisor con el TDT incorporado que se lo trajeron los Reyes Magos, pero está preocupado porque "en el pueblo no lo tengo todavía preparado" y a sus nietos les encanta ver Clan TVE, así que tendrá que darse prisa su hijo en "hacer la instalación necesaria".
Amparo (76) no tendrá problemas cuando llegue el apagón analógico, pues ya ha aprendido a utilizar el nuevo mando "para cambiar de Canal Sur a Telecinco", pero a su amiga Teresa (55) no le queda más remedio que aplicarse puesto que ella lo único que sabe hacer hasta ahora es "apagar y encender".
Al matrimonio compuesto por Francisca (87) y Manolo (89) les viene un poquito grande lo de las nuevas tecnologías y su hija les ha señalado con esparadrapo los botones principales del nuevo mando a distancia. Francisca cree que "los gobernantes no duermen pensando cómo van a fastidiar a los ciudadanos, si yo veo estupendamente El diario en Antena 3 no sé porque hay necesidad de cambiar".
Ana, muy coqueta ella, no ha querido decir su edad, pero al igual que Francisca cree que "esto sólo sirve para gastar más dinero". Ella aún no ha comprado el adaptador, pero está esperando a que su hijo lo haga. Lo dicho, la televisión no tendría futuro sin los hijos.