-¿Cuál es su primer objetivo como presidente de la Audiencia?
-Lo primero, tomar posesión. Después, reunirme con los compañeros para intercambiar impresiones y plantear un programa de actuación del que el primer objetivo sería intentar adecuar la planta judicial a la carga de trabajo, para que se creen órganos judiciales con racionalidad y según la distribución del trabajo. Hace falta completar la planta judicial de las diferentes secciones de la Audiencia hasta que todas cuenten con cuatro magistrados. Y también me gustaría unificar criterios y prácticas judiciales, respetando la independencia de cada juez, pues redundaría en beneficio de la ciudadanía.
-La consejera de Justicia anunció que este años se crearía la Sección Novena de lo Penal. ¿Qué es más razonable, completar o crear una sección nueva?
-Las dos cosas son razonables a efectos prácticos. Puestos a elegir, prefiero primero completar, con cuatro magistrados para cada sección, y luego crear una sección nueva. Esta última opción es más cara porque requiere de instalaciones, infraestructuras y espacio en el edificio, pero ambas opciones serían bienvenidas.
-¿Qué radiografía hace de la Justicia en Sevilla?
-Pues que no se encuentra ni mejor ni peor que otras audiencias provinciales de volumen similar a la de Sevilla. En Andalucía, Córdoba y Jaén funcionan perfectamente. En Málaga y Sevilla la carga de trabajo es superior a la máxima soportable, especialmente en el orden penal, y más aún si tienen alguna especialización. Las secciones civiles están bien, pero se nota un incremento paulatino.
-¿Cómo se va a notar el plantón de los jueces por la congelación salarial?
-Es una repercusión mínima. Además, se llegó al acuerdo de igualarnos las pagas extraordinarias a las ordinarias y la reivindicación se ha desinflado un poco. Pero el éxito es que las cuatro asociaciones han ido al unísono.
-¿Cuál es la principal deficiencia de la Justicia?
-La más apremiante son las instalaciones. Sé que la Consejería de Justicia ha apostado por los terrenos de la Autoridad Portuaria, pero prefiero Los Gordales y, si me apura, prefiero lo que tengo... No es ya tanto el dónde, sino el cuándo. Los jueces estamos deseando de que nos trasladen a un sitio digno y adecuado, pero que se haga con prontitud. Si hay que irse a los terrenos del Puerto, pues nos iremos. Para eso hace falta voluntad política y económica, pero no judicial; somos ajenos a esas decisiones. Pasa el tiempo y seguimos en el mismo edificio obsoleto, insuficiente y manifiestamente inadecuado en el que ya casi no cabe una mesa y una silla más.
-¿Piensa reunirse con la consejería para abordar el proyecto del Campus Judicial?
-Hay una comisión en la que se tratará la distribución del espacio. Ahí sí tenemos mucho que decir. Desde luego, cuando tome posesión me incorporaré a las reuniones y la consejería va tener en mí a un colaborador, pero también seré exigente y crítico. A la Administración siempre hay que exigirle.
-¿Y en cuanto a la provincia?
-La provincia necesita refuerzos, muchos órganos judiciales y reformas y nuevas instalaciones. Hay puntos no diría que negros, pero sí grises, como son Sanlúcar la Mayor, que lleva todo el Aljarafe, Coria, Lora y Dos Hermanas.
-¿Le preocupa la situación del Contencioso-administrativo?
-Claro. Me preocupa soberanamente la saturación de trabajo que tienen en los juzgados de lo Contencioso-administrativo.
-¿Cuál sería la solución?
-Pasa por dos cosas. Primero, por crear nuevos órganos judiciales para asumir la carga de trabajo creciente. En segundo lugar, por arbitrar algún tipo de reforma legislativa que impida que prácticamente todo lo que tenga que ver con la Administración acceda a los contenciosos. Tiene que llegarse a algún sistema porque es imposible asumir esa cantidad cada vez más creciente. No se puede consentir que se fijen los juicios a dos años vista, eso llama mucho la atención, pero no es tampoco culpa del juez, que se ve abocado a hacerlo por la carga judicial que tiene.
-¿Qué piensa de la propuesta de abrir los juzgados por la tarde?
-Depende de lo que queramos agilizar. Si queremos agilizar las sentencias, la apertura por las tardes no tiene sentido porque las sentencias las pone el magistrado en la soledad de su despacho. Si con eso se quiere atender al ciudadano, a lo mejor. Lo del Registro Civil sí es más lógico.
-¿Qué le parece el retraso en la renovación del CGPJ?
-Todos sufrimos las consecuencias. En democracia no podemos permitir que esto ocurra y se repita. Hay que tomar medidas para evitar que vuelva a ocurrir porque daña la credibilidad de la Justicia.
-¿Qué opina de la reforma propuesta por el PSOE para la renovación?
-La solución ideal sería que se pudiera renovar el consejo con carácter puntual. Es decir, si no en los cinco años, con una propina de uno o dos meses.
-Por último, ¿qué le diría a sus compañeros?
-A los funcionarios les agradezco su esfuerzo y a los magistrados el apoyo que me han brindado. A los ciudadanos, que estén esperanzados en que podamos mejorar las prestaciones. Por mi parte, empeño e ilusión no me van a faltar, y pienso contar con cada uno de los magistrados. Todos tienen que poner un granito de arena.