Los juzgados de paz ya tienen dinero para iniciar la renovación de sus sedes. La inversión, que sufraga en un 68% la Consejería de Justicia, se eleva a 75.000 euros y tendrá como destino a 16 pueblos del área metropolitana. El destino de las ayudas irán, sobre todo, a la adquisición de mobiliario y la adaptación de las sedes para los discapacitados.
La reforma y equipamiento de los juzgados de paz se ejecutarán en el plazo de tres meses, que es el fijado por la Delegación Provincial de Justicia para la mayoría de las obras, que resolvió la concesión de ayudas en diciembre. De estas subvenciones se beneficiarán 35 municipios de la provincia, de los cuales cerca de la mitad se ubican dentro de la Gran Sevilla, con mejoras en 16 juzgados de paz.
Las inversiones más cuantiosas se destinan a mejorar el acceso de las personas con discapacidad. El mejor parado es el juzgado de paz de Camas, que percibe una ayuda de 6.000 euros para la construcción de aseos adaptados, lo que supone un 33% del coste de una obra que asciende a un total de 17.699 euros. La diferencia lo aportará el Consistorio camero. Pilas también recibirá una cuantía de 6.000 euros, cuyo cometido es la eliminación de las barreras arquitectónicas en el juzgado de paz municipal.
Además, está la particularidad de que todas las subvenciones, salvo la que recibe La Algaba, se concentran en municipios de la comarca del Aljarafe. Así, a los ya citados Camas y Pilas, se suman Aznalcázar, Carrión de los Céspedes, San Juan de Aznalfarache, Villamanrique de la Condesa, Bollullos de la Mitación, Umbrete, Tomares, Benacazón, Almensilla, Santiponce, Aznalcóllar, Huévar del Aljafarafe y Almensilla. Todos ellos solicitaron la ayuda para la adquisición de mobiliario o, en el caso de La Algaba, para instalar una cámara de seguridad en el juzgado de paz.
Solicitudes. A pesar de que hay 16 municipios beneficiados, la Delegación de Justicia también desestimó concesiones a otros 10 municipios de la Gran Sevilla, que solicitaron, entre otros asuntos, obras de restauración y adecuación de la sede, como en Olivares y Villanueva del Ariscal; o la adquisición de equipamiento, como ocurren en Salteras y La Rinconada.
Las subvenciones concedidas fueron entregadas a finales del año pasado. El juzgado de paz es el órgano de la Administración de Justicia que está en los municipios donde no existe un juzgado de primera instancia. Están servidos por jueces no profesionales que llevan a cabo funciones jurisdiccionales y mientras dura su cargo integran el Poder Judicial.
