Los famosos brotes verdes de la crisis parecen que comienzan a aflorar a tenor de las cifras de los juzgados sevillanos, que en el primer semestre del año han visto descender en un 25% el número de despidos. Sin embargo, en algunos órganos judiciales las semillas de la esperanza ni siquiera han cuajado, ya que asuntos como los desahucios o los juicios por impago de deudas mantienen el ritmo de crecimiento que iniciaran hace dos años coincidiendo con la recesión económica.
Según las cifras del Decanato de los juzgados de Sevilla, en el primer semestre de este año se han contabilizado menos despidos que en el misma periodo de 2008. De esta forma, del 1 de enero al 30 de junio de 2010 se han registrado 2.088 casos, frente a los 2.788 de 2008. Una tendencia a la baja que ya se dio en el primer semestre de 2009, cuando los juzgados de lo Social de Sevilla recibieron 2.455 casos de despidos. Lo mismo ha ocurrido con los casos de conflictos colectivos que de los 102 de 2008, se ha pasado a los 97 contabilizados en 2010.
Aunque de forma más liviana, la mejoría de la situación económica parece que también comienza a reflejarse en los dos juzgados de lo Mercantil. Comparando los dos primeros semestres de 2008 y 2009, el aumento de procedimientos concursales, figura que sustituye a la antigua suspensión de pagos de una empresa, fue de un 214%, ya que de los 49 de 2008 se pasó a los 154 que se registraron en el primer semestre del año pasado. De enero a junio de este año, la situación ha mejorado levemente al bajar el número de concursos un 26%, al contabilizarse 114 asuntos de este tipo.
Sin embargo, estos datos positivos, no tienen el mismo reflejo en los juzgados de Primera Instancia de la capital que, desde que comenzara la crisis, no han parado de ver cómo aumentan los asuntos mes a mes. De ahí que, fuentes judiciales consultadas por este periódico crean que aún es demasiado pronto como para comenzar hablar de una auténtica recuperación económica y, como consecuencia, de la saturación que sufren los juzgados. Un claro ejemplo son los desahucios, pues comparando el primer semestre de 2008 con el de 2010 el crecimiento ha sido de un 26%. De esta forma, la cifra ha ido aumentando en estos tres años de 609, a 741 hasta los 791 de 2010.
Por el contrario, tanto las notificaciones de embargos, como las ejecuciones hipotecarias (reclamaciones de los bancos ante los impagos de éstas) sí han experimentado un ligero descenso. De los 5.549 asuntos que registrados por el Servicio Común de Notificaciones y Embargos en 2008, la cifra se disparó a los 6.134 del año pasado, hasta que en el semestre que se acaba de cumplir se ha regulado más o menos las cifras con 5.922 asuntos. En el caso de las reclamaciones hipotecarias, la evolución ha sido prácticamente similar, pues de 2008 a 2009 aumentaron un 82% (de 456 supuestos a 832), mientras que de enero a junio de 2010 ya han descendido un 7% (de 832 han bajado a 782).
Pero la cara más cruda de la crisis se sigue reflejando en estos juzgados, los más castigados por el crecimiento de asuntos, en las reclamaciones de deudas e impagos, ya que siguen siendo el capítulo que más asuntos genera a los juzgados de Primera Instancia de Sevilla. De hecho, el juez decano, Federico Jiménez Ballester, ya advirtió en su informe anual que la jurisdicción que presenta más carencias es la Civil, y que según sus estimaciones harían falta 28 juzgados de Primera Instancia, ya que están trabajando "un 130% por encima del módulo establecido por el Consejo General del Poder Judicial". En este sentido, los procedimientos monitorios (en los que se reclaman cantidades de hasta 30.000 euros) han crecido un 62% con respecto a 2008 y un 15% comparados con 2009. Es decir, de los 7.155 de hace dos años, crecieron hasta los 10.073 de 2009, hasta los 11.600 de este año. En total, estos juzgados han recibido un 30% más de asuntos, es decir, 10.000 más.
