Los mayores de 55 años que estudien en el Aula de la Experiencia de la Universidad de Sevilla (este curso se han matriculado hasta 1.800 personas) podrán, previo examen de evaluación, entrar en un grado y obtener una carrera. Es el proyecto que anunció ayer la Hispalense en el acto de inauguración del curso.
El rector de la Universidad de Sevilla ya lo enunció en su discurso de apertura del curso académico: “Estamos diseñando un proyecto educativo que sirva a los mayores de pasarela para el ingreso en los grados”. Y ayer fue ratificado por la vicerrectora de Relaciones Institucionales, Teresa García, y la directora del Aula de la Experiencia, Rosa Ávila, en el transcurso de la inauguración del curso 2009/2010 en dicha Aula. Los mayores de 55 años que se matriculen en este programa podrán estudiar una carrera. El ingreso en los grados –que podrían ser de la rama de Humanidades, Derecho y Bellas Artes, las tres especialidades que cursan los estudiantes del Aula de la Experiencia– es lo que tiene ahora que definir la Universidad cambiando, para empezar, el plan de estudios de la actividad que se oferta en la Facultad de Comunicación, en la Cartuja.
Hasta ahora, la formación en el Aula de la Experiencia abarca tres cursos. La idea es implantar un cuarto año al que podrían acceder todos. El que quisiera entrar a partir de este cuarto año en un grado tendría que superar algún tipo de prueba que aún no está definida. Al menos, ésa es la idea que tiene en mente la directora del Aula de la Experiencia, Rosa Ávila. La mayoría de los mayores que reciben esta formación poseen estudios universitarios, un porcentaje menor sólo tienen estudios medios, y en menor cantidad, los estudios son básicos. El catedrático de Historia de América y miembro del Consejo Editorial de El Correo de Andalucía, Ramón María Serrera, fue el encargado de dar la conferencia inaugural del curso académico, titulada Mujeres en clausura: macroconventos peruanos en el Barroco. Una disertación didáctica y amena sobre el peso de la vida conventual en la época colonial que recibió una calurosa ovación por parte de los asistentes, algo más de un centenar. El decano de Comunicación, Francisco Sierra, recibió a los estudiantes y les invitó a sentir la facultad “como su hogar universitario”. Les hizo también un ruego: “Enséñennos a vivir con alegría”. El delegado de Bienestar Social, Manuel Gálvez, resaltó el éxito del programa del Aula de la Experiencia y anunció a los presentes que la Junta de Andalucía está elaborando un libro blanco del envejecimiento.La vicerrectora Teresa García fue la encargada de clausurar el acto. En su discurso destacó que este tipo de ofertas formativas están imbricadas en el nuevo Espacio Europeo de Educación Superior o Plan Bolonia, porque “no sólo formamos a investigadores y profesionales, sino que debemos contribuir a hacer una sociedad más culta y justa”.
Entrevista a Rosa Ávila. Directora del aula de la experiencia de la Universidad de Sevilla
–¿Cuál es el balance que hace desde la puesta en marcha del Aula de la Experiencia allá por el curso 1997?
–Tremendamente positivo. Yo tomé posesión el pasado mes de junio y no esperaba que este programa tuviera la aceptación y el compromiso que tiene por parte de las personas mayores.
–¿Cuál es el perfil del alumno de este Aula?
–Están muy motivados. Vienen todos los días con las tareas hechas, las lecciones leídas y participan mucho en los debates.
–¿Cuál es la media de edad?
–En torno a los 65 años, aunque ya hemos recibido peticiones de alumnos con 50 años y no descartamos que en los próximos cursos, con motivo de la crisis económica y el paro, empecemos a recibir solicitudes de gente con 45 años.
–¿Hay listas de espera ya?
–Sí. Este curso se han quedado sin plaza en torno a 40 personas que solicitaron entrar.
–¿Y qué tipo de profesor es el que participa en el Aula?
–Es un docente en activo y experto en la materia que se les imparte a los alumnos. Estos alumnos dan mucho trabajo en el buen sentido de la palabra. Son muy críticos y debaten con mucho entusiasmo cualquier asunto que se les plantea.
–En la inauguración del curso, la vicerrectora de Relaciones Institucionales ha anunciado que se está buscando un espacio concreto para el Aula de la Experiencia. ¿Se tiene ya?
–Estamos en ello. El rector se ha comprometido con este asunto. Buscamos un edificio con su propia seña de identidad. Queremos que el Aula de la Experiencia sea un centro más de la Hispalense.
