Los dos jóvenes de 15 años detenidos la semana pasada acusados de obligar a una niña a hacerle una felación a uno mientras el otro lo grababa con el móvil no eran del mismo instituto. El suceso ocurrió en verano en una discoteca, pero fue descubierto hace un mes cuando la niña informó a sus profesores de que en el instituto circulaba el vídeo. El centro lo denunció a los padres y éstos a la Policía.
Hace apenas un mes, una alumna de 14 años del Instituto de Enseñanza Secundaria Miguel Servet, de Sevilla Este, acudió al despacho del jefe de estudios para quejarse de que unas compañeras la estaban insultando. Decía que la llamaban "guarra" y "sucia" y que le dejaban "notas ofensivas". El profesor, según fuentes escolares, quiso saber por qué la insultaban con tales palabras, y la niña le contó que esas chicas estaban haciendo circular entre alumnos del instituto un vídeo a través del móvil en el que aparecía ella practicando una felación a un chaval.
Todo había ocurrido hacía cuatro meses y medio, en pleno julio, y fuera del ámbito escolar. Según el relato que la niña contó al profesor, dos jóvenes la habían forzado a hacerle una felación a uno de ellos en una discoteca, mientras el otro lo grababa con el móvil. Los profesores no saben si la niña y los dos chavales se conocían de antes o si no existía relación entre ellos. Lo acusados no eran alumnos del centro ni tenían vinculación alguna con él, al contrario de lo que se dijo en un principio.
Cuando la niña denunció ante sus profesores que había sido víctima de un abuso sexual, hacía una semana que el vídeo pasaba de mano en mano entre los alumnos del instituto. El jefe de estudios sancionó a las alumnas que habían insultado a la niña, confiscó sus móviles y llamó a los padres de la pequeña, que desconocían lo que había pasado. Al parecer, la niña prefirió ocultarlo "porque le daba vergüenza", según fuentes policiales. La familia denunció a los dos chavales, que fueron detenidos la semana pasada.
Los dos chavales eran menores y no tenían antecedentes. La Policía les interrogó y fueron detenidos acusados de un delito de agresión sexual y contra la intimidad por distribuir el vídeo.
Los jóvenes entregaron "voluntariamente" el móvil con el que supuestamente habían grabado las imágenes de la felación. Más tarde fueron puestos en libertad con cargos. La Fiscalía de Menores ha cogido las riendas del atestado para continuar con la investigación. De confirmarse su culpabilidad, los jóvenes podrían ser internados entre uno y cuatro años, y pasar hasta tres años de libertad vigilada.
El comunicado de la Policía sobre la detención de los menores acusados de abuso sexual ha generado cierto malestar en el Miguel Servet. La nota policial no mencionaba el nombre del centro -un dato que descubrió la Cadena SER- pero aseguraba que los dos detenidos eran alumnos del mismo instituto en el que estudiaba la víctima, un extremo desmentido por fuentes escolares.
"Este hecho sólo lo conocían dos o tres profesores y los padres de la niña. El vídeo sólo lo tenían tres o cuatro alumnos. Ahora todos creen que saben quién es la niña y el daño que esto le puede causar es inmenso", aseguran las mismas fuentes.
