El cachete, un recurso utilizado por muchos padres para corregir las conductas de sus hijos, puede pasar a mejor vida el próximo jueves. El pleno del Congreso decidirá ese día si suprime dos artículos que conceden la potestad de "corregir razonablemente" a los niños mediante el uso de estas técnicas.
La modificación legal está incluida como disposición adicional al Proyecto de Ley de Adopción Internacional, que vuelve al Congreso tras ser rechazado por el Senado. A pesar de ello, el Congreso tumbará las tres enmiendas introducidas en el Senado con los votos de CiU, PNV y PP, unas formaciones que no ven apropiado la retirada del cachete.
El Grupo Socialista en la Cámara Baja, con el apoyo de IU-ICV y de ERC, logrará que los padres no estén amparados legalmente para dar una bofetada a sus hijos. El nuevo texto del Código Civil verá eliminada la posibilidad de que los padres puedan "corregir razonable y moderadamente", por lo que a partir del próximo jueves deberán corregir a los menores "con respeto a su integridad física y psicológica".
Por su lado, el proyecto de Ley de Adopción Internacional, aprobado por el Gobierno en junio, recibirá el jueves el visto bueno del Congreso. El texto refuerza los mecanismos para impedir la trata de niños y aumenta las garantías del menor adoptado.
La norma prohíbe tramitar adopciones en países en guerra o que sufran los efectos de un desastre natural, y permite que los menores sepan los datos sobre sus padres biológicos al alcanzar los 18 años. Igualmente, los españoles que acogieron temporalmente a menores de Chernobil y de partes de Ucrania, podrán adoptar legalmente a niños huérfanos.
El texto prohibía adoptar a los menores extranjeros que hayan sido acogidos en programas humanitarios de estancia temporal por motivo de vacaciones, estudios o tratamiento médico. Sin embargo, la Cámara Baja modificó el proyecto para permitir la tramitación de estas solicitudes.
