Cultura

«Los países que dominan son los que imponen su propio idioma»

El profesor de esperanto Rafael Mateos inaugura hoy en la Biblioteca Pública Infanta Elena un curso gratuito de iniciación a esta singular lengua.

el 06 oct 2014 / 12:45 h.

TAGS:

El profesor Rafael Mateos, fotografiado junto a su alumno de esperanto más aventajado, Francisco Rodríguez. / J. M. Paisano El profesor Rafael Mateos, fotografiado junto a su alumno de esperanto más aventajado, Francisco Rodríguez. / J. M. Paisano

Si creía que el idioma universal es el inglés, estaba en un error. Lo es el esperanto, una lengua sin patria ideada, hoy sabemos que un tanto utópicamente, con la esperanza de servir de vehículo de unión entre los pueblos. Un idioma llano con unas reglas de pronunciación muy simples que algunos entusiastas se encargan de mantener vivo; por si prende la llama y, quien sabe... Natural de Moguer, Rafael Mateos, es un filólogo que lleva años impartiendo su magisterio en esperanto en países como China, Ucrania y Turquía. Desde esta semana, lo hace en Sevilla. Por amor al arte. Ycomo prueba de que no está solo en esta aventura, llega a la entrevista junto a su mejor alumno, Francisco Rodríguez, que comenzó en los 70 a aprender el idioma en una academia de la calle Sol especializada, casi nada, en esperanto.

El esperanto se creó en el siglo XIX. ¿Qué ha fallado para que nunca haya tenido el calado que sus primeros cultivadores pensaron? No se apresure. ¿Cree que hay algo más universal que el sistema métrico decimal, que se creó en la Ilustración?Pues no está incorporado aún en todos los países del mundo. Si el esperanto no se ha impuesto como lengua común entre los pueblos es porque los países que dominan al resto del mundo son quienes imponen su lengua. En 1921 la Sociedad de Naciones trató de extenderlo, pero Francia se opuso porque entonces capitaneaba Europa comercialmente. Hoy día, con su idioma arrasado por el inglés, se arrepienten. El esperanto es justicia porque es el idioma de todos. Por eso, su tiempo, quizás, no ha llegado todavía. Pero lo hará.

O no. Porque, guste más o menos, la supremacía del inglés parece a estas alturas imparable. Vaya por delante que durante muchos años de mi vida he sido profesor de inglés. ¡Me encanta! No soy sospechoso de ser una persona refractaria a él. Pero, sabía usted, que quien fue presidente francés, Charles de Gaulle, siempre tenía a su lado un nativo inglés como intérprete. El político no se fiaba de su amplio conocimiento de la lengua de Shakespeare. ¿Quiere que hablamos, por no ir lejos, del pobre éxito de los españoles con el inglés? Es una lengua enormemente complicada. No así el esperanto, un idioma sencillo que tiene una gramática con tan sólo 16 reglas sin excepciones. Un chino habrá de invertir tres horas en semana durante seis años para hablar un inglés fluido. En sólo dos, podría conseguir lo mismo con el esperanto. Y un español, en nueve meses, podría alcanzar el equivalente a un B2 de inglés.

Pese a su entusiasmo, el esperanto, a la luz del siglo XXI, se ve casi como una anécdota histórica. Hay gente que ha dado su vida por él, y no merece ser tildado de anécdota. La Unesco lo ha reconocido dos veces como lengua de difusión. No en vano, el esperanto es la realización de los sueños de la Ilustración. Su principal problema es que no se ha expuesto a los medios de comunicación porque siempre ha habido miedo en la comunidad esperantista internacional a ser tildados de bichos raros. No puede ser. Ha habido papas, presidentes de gobierno y Premios Nobel que han hablado y han defendido el esperanto. Quienes lo hablan afirman que el sonido musical del esperanto enamora. Que, aunque sea neutral, cada uno imprime su musicalidad.

¿Cree usted que la resistencia psicológica a este idioma se debe a haber sido creado en un laboratorio lingüístico? Cualquier lengua es una creación de la humanidad;no existe ninguna que proceda de algo inmanente. Son, en definitiva, el resultado del quehacer de las sociedades. Por otra parte, siendo bastante más campechano, le propondré que hablemos de movilidad. Ir montado a caballo a los sitios es lo natural; hacerlo en coches, artificial. ¿Qué le parece? El esperanto es una lengua que se ha racionalizado;por ello es un idioma relativamente sencillo.

¿Cuál es el perfil del alumno de esperanto? Lo más heterogéneo del mundo. Y en Sevilla, en Andalucía en general, hay mucho interés. Con el curso que comenzamos hoy y al que se puede apuntar, libre y gratuitamente, quien quiera, me he propuesto relanzarlo.

Singularmente, Sevilla tuvo bastante que ver con este idioma algunos años atrás. Sí, sí. En los años 70 existió en la calle Sol una academia de idiomas especializada en esperanto. Pero más importante aún fue lo que sucedió en 1905. Toda la Policía Local de Sevilla tuvo que aprender esperanto. Era la época en la que se creó, y los políticos locales de entonces tomaron consciencia de la importancia que iba a tener el que aspira a ser el lenguaje universal.

¿A qué suena el esperanto? El 70% proviene del latín y del francés. Y su estructura lingüística es aglutinante, lo que la emparenta con el chino. Los sonidos son fáciles porque en su creación existió el compromiso de que ninguna nación se sintiera fonéticamente alejada de él.

Ilústrenos. ¿Qué hora es?Kioma horo estas? ¿de qué país eres? De kiu lando vi estas? Gracias, dankon. El sol brilla, La suno brilas. Te amo, Mi amas vin.

[En este instante, el profesor Rafael Mateos intercambia, en esperanto, una breve conversación con su alumno, Francisco Rodríguez, quien se confiesa nada políglota]

Habla español y esperanto. ¿Por qué tomó esa opción?

Me acerqué al esperanto en 1974, una época de muchas inquietudes. Y este idioma era muy ilusionante. Empecé en la calle Sol y, rápidamente, por ideología empaticé mucho con el esperanto. Hoy es mi segunda lengua. Y gracias a Internet y a foros específicos de Skype podemos comunicarnos en esperanto con gente de todo el mundo.

Advierto bastante carga ideológica en el idioma. [Rafael Mateos retoma la conversación]La misma palabra esperanto es una maravilla. Significa «el que tiene esperanza». Es una lengua cargada de optimismo y de fe en la humanidad. Pero el único sustrato ideológico bajo nuestra lengua es la armonía y la paz universal.

El considerado como padre de la patria andaluza, Blas Infante, simpatizaba con ustedes. ¡Él aprendió esperanto! Y llegó a entender este idioma como una lengua paralela a nuestro castellano con variantes típicas de la región. Tolkien, autor de El Señor de los Anillos, también lo fue. Y la lengua élfica que describe toma préstamos del esperanto. Otro insigne escritor, Tolstoi, lo cultivó, y siempre llevó a gala lo insignificante del esfuerzo para hablar esta lengua.

También se ha utilizado como fuego cruzado entre dictaduras de diverso pelaje. No se lo negaré, no. Pero esos episodios no hacen sino dejar claro que este es un idioma sin color político, ajeno a las cuitas del poder. Adolf Hitler, en Mi lucha, aseguró que aprender el esperanto era una forma de ser dominados por el judaísmo. Esta lamentable afirmación tiene que ver con que su creador era judío, y la consecuencia fue la persecución de quienes hablaban esperanto. En 1937, otro dictador de signo opuesto, Stalin, acusó al esperanto de ser una «lengua de espías» y lo prohibió. El esperanto es, en fin, universal, común y neutral para entendernos en igualdad de condiciones, para derribar parcialmente la Torre de Babel.

¿Cómo son las clases que hoy comienzan? Divertidas, con buen ambiente, y en las que hablamos de todo tipo de temas. Fuera el repetir tediosamente para aprender. En tres meses puedes defenderte en esperanto. Como profesor busco el factor sorpresa y la ilusión por conocer. No hay exámenes y sí mucha mímica para memorizar lo nuevo.

¿Más? Es gratis, apúntese enviando un email a informacion.bp.se.ccd@juntadeandalucia.es. Y visite la web www.lernu.net.

  • 1