Los partidos del Gobierno Catalán y CiU están a punto de llegar a un acuerdo unitario donde se establezca hasta donde están dispuestos a ceder en la negociación para un nuevo modelo de finananciación, según aseguró el diputado convergente en el Parlament Francesc Homs.
En una conferencia de prensa en Prada (Francia), Homs destacó que el pacto servirá para "precisar qué entendemos todos por un mal acuerdo en financiación" y, por tanto, "cuál es el mínimo a partir del cual no se puede aceptar lo que se propone desde Madrid". Preguntado por qué escenario se podría dar en el caso de que el PSC apoyara unos presupuestos generales sin un previo acuerdo en financiación, Homs resaltó el papel "singular" de ERC en las negociaciones porque, recordó, puede formar una mayoría alternativa con CiU en el Parlament.
No obstante, aclaró que ambas fuerzas políticas "no han hablado del asunto" en las reuniones, aunque "el comentario aparece, porque es inevitable".
Sin embargo, el diputado de ERC en el Congreso, Joan Tardà, no cerró las puertas el viernes a una salida del gobierno en el caso que los diputados del PSC apoyaran finalmente las cuentas estatales, aunque tampoco descartó que la fuerza independentista se quedara en el ejecutivo "previa consulta a las bases".
Homs pasó ayer por la Universitat Catalana d'Estiu (UCE) de Prada, que culmina hoy, para participar en un debate sobre el catalanismo en el siglo XXI. En la rueda de prensa previa, el diputado convergente no ofreció muchos detalles sobre los contenidos del pacto unitario entre los partidos catalanes, ni los plazos exactos, pero aseguró que está "mucho más maduro de lo que alguien podría llegar a pensar", pese a que "existen amenazas que alguien pueda estropearlo, por razones políticas".
El responsable de Estudios y Programas de CDC avanzó que, una vez se selle el pacto, tampoco se ofrecerán muchos detalles de su contenido para no debilitar la posición unitaria catalana en la negociación.
Con la propuesta, aseguró Homs, "seremos invencibles" ante declaraciones "contundentes" como las del ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, quien aseveró que los diputados del PSC en el Congreso votarían los presupuestos independientemente de si había acuerdo en financiación.
Por su parte, el portavoz de ERC en el Congreso, Joan Ridao, avanzó ayer que esta semana se pondrá en contacto con representantes de PSC, CiU e ICV para proponerles crear una Mesa de Partidos Políticos Catalanes que coordine su acción en Las Cortes en asuntos como los próximos Presupuestos del Estado.
En una entrevista concedida a la Agencia Efe, Ridao explicó que con esta propuesta ERC pretende "reafirmar la unidad catalana" ante la negociación del nuevo sistema de financiación y garantizar que los partidos catalanes no actuarán por libre en el Congreso.
Aunque Ridao sostiene que el frente catalán "no se ha roto", admitió que el pacto entre ICV y el Gobierno para evitar la comparecencia de José Luis Rodríguez Zapatero, y las declaraciones del dirigente del PSC Celestino Corbacho dando por hecho el apoyo del PSC a los presupuestos, lo han "agrietado".
En este sentido, el secretario general del Grupo Socialista en el Congreso, Ramón Jáuregui, se mostró comprensivo con la posición que está manteniendo el PSC en el debate sobre la reforma de la financiación catalana y autonómica, porque le "condiciona" formar parte de la Generalitat y debe defender sus intereses. Sin embargo, rechazó la posibilidad de que la queja se traduzca en no apoyar los Presupuestosporque el PSC "es también PSOE" y la unidad en el Congreso "es incuestionable". Como miembro de la Generalitat, expuso Jáuregui, la formación que lidera José Montilla "tiene el deber de negociar el mejor acuerdo para Cataluña y exigir el cumplimiento del Estatuto", algo en lo que "coincide" con el Gobierno. y con el PSOE.
