La ciudad acaba de cerrar la Semana Santa de 2008, una edición que el alcalde de Sevilla califica de «extraordinaria». Asegura que «algo hay que hacer ya» con la ampliación de la Carrera Oficial y cree que el debate sobre las catenarias y los pasos es «puramente esteticista».
-¿Cuál es el balance que hace de la Semana Santa 2008?
-Extraordinario. Ha habido momentos en los que la climatología ha hecho de las suyas, pero el conjunto ha sido esplendoroso. Estamos satisfecho también porque la ciudadanía se ha adaptado a los cambios en la piel del Centro. Pareciera que la peatonalización se hubiera hecho para que pudiéramos disfrutar aún con mayor plenitud de la Semana Santa, que no sólo es para el pueblo sino que es del pueblo. Cualquier intento de querer apropiarse de ella es inútil.
-¿Será la de 2009 entonces la de la mejora de la Carrera Oficial?
-Algo hay que hacer. La propuesta está desde hace años y ya es hora de hacer algo.
-Dice usted que la ciudadanía se ha adaptado a los cambios, pero el paso de las cofradías por las catenarias ha despertado todo tipo de opiniones. ¿Qué le parece al alcalde?
-Los cables del tranvía han acompañado a los pasos de toda la vida de Dios. En éste, como en otros muchos casos, estamos demostrando que es posible combinar tradición y modernidad. Sevilla no es una ciudad-museo.
-Para la Semana Santa de 2009, ¿veremos toda la Avenida libre de postes?
-Eso pretendo. Me comprometí a que en la Carrera Oficial no hubiera este año, y así ha sido. Durante un tiempo conviviremos con los cables. Hasta que no haya un sistema perfecto para sustituirlos, no lo pondremos en marcha. Vamos a la vanguardia, por eso tenemos que esperar a que la tecnología del tranvía llegue. Lo que no nos falta es ambición, que es lo que Sevilla se merece.
-Pero también se podría haber esperado a tener la tecnología para poner el tranvía.
-La discusión de los postes y las catenarias es puramente esteticista. Y, sin embargo, la discusión sobre si deberíamos tener o no un sistema de transporte público acorde con lo que hay en todas las ciudades históricas del mundo es fundamental. En Sevilla primero hay escepticismo y, después, se abrazan los cambios.
-Esta Semana Santa se han reproducido los mismos problemas de tráfico y no ha funcionado el tranvía ni tampoco tenemos Metro. ¿Usted puede garantizar que el 30 de septiembre funcionará la línea 1?
-Yo le puedo garantizar que la Semana Santa del año que viene habrá miles de ciudadanos que dejarán los coches en sus urbanizaciones del Aljarafe y podrán venir en Metro.
-Elude pronunciarse sobre la fecha del 30 de septiembre.
-Porque no me corresponde. Es una determinación que le compete a la Junta.
-Sobre las otras líneas del Metro, el Ayuntamiento ha planteado como hipótesis de trabajo un trazado de la línea 3 en superficie por la Ronda...
-[Corta] Yo he dicho que se trata de una hipótesis muy hipotética. Voy a estudiar todas las propuestas, pero, desde mi perspectiva, el Metro tiene que ser, va a ser, fundamentalmente subterráneo. Será en superficie en los tramos en los que no interfiera en la vida de la ciudad.
Véase la entrevista al completo en la versión imprensa de El Correo de Andalucía.
