La actriz sevillana María León.
ENTREVISTA POR JUAN CARLOS ROSADO -Le han pasado cosas muy grandes en poco tiempo. ¿Le ha dado tiempo de digerirlo? -Sinceramente, no. Ahora estoy empezando a disfrutarlo. Cuando termine la serie me voy a tomar un par de meses de vacaciones para pensar. Poco a poco las cosas se van colocando, pero cuesta trabajo digerirlo. No hemos parado. Con todos estos premios, no he dejado de trabajar. Tenía una espinita en el corazón: la temporada anterior no pude disfrutar de la serie y este año me he dedicado a hacerlo.
-¿Se animará a dirigir como ha hecho su hermano Paco? -Eso son palabras mayores. De momento, tengo que aprender mucho de la interpretación y trabajar mucho para intentar hacer otras cosas. Para eso hay que tener un talento y valentía especiales como Paco.
-¿Le gustaría que él le dirigiera en los escenarios? -Sí, en cualquier cosa que a él le viniera a la cabeza en cine, teatro, tele o lo que sea. Todo lo que hace se convierte en oro. Y yo aprendo de él mucho, profesional y personalmente.
-¿Cree que su madre es un diamante en bruto? -Sí. Ha hecho un gran trabajo en Carmina o revienta. Ha interpretado un papel magnífico.
-¿Sabía que tenía ese talento? -Sabíamos que teníamos una madre que era una gran contadora de historias, pero no podíamos imaginar que poseyera esa cosa tan rara y tan especial a la hora de interpretar. Teníamos claro que la película se iba a hacer, pero no que la fuera a interpretar ella. Después del casting, nos dimos cuenta de que no había otra persona que defendiera el personaje con la misma dignidad.
-Su hermano arriesgó mucho. -Sí, porque es un hombre que ama mucho su profesión. Estamos en un momento en el que tenemos que hacer movimientos. Él fue inteligente: olisqueó, tanteó y decidió arriesgarse. Y le ha salido muy bien.
-Le llueven los premios, pero ¿piensa en los de televisión? -No me lo planteo. Este año me han venido tantos, que todavía tengo que digerirlos. ¿Tienen menos importancia los de tele que los de cine? No es así. Un premio es un reconocimiento a un trabajo.
-¿Le hace la misma ilusión un Goya que un premio TP? -Claro que sí. Siempre que reconozcan mi trabajo, me hace ilusión. Pero los premios no te dan de comer. Es mas difícil que te reconozcan un papel en la tele, porque es más complicado hacer un buen trabajo: aquí no tienes tiempo para ensayar y no hay dirección. Y hay mucha competencia. Parece que con la crisis se agudizan las ideas y tenemos que remangarnos. Ahora no puedes elegir un género, porque está difícil la cosa. Debes valorar lo que significa la tele: es un aprendizaje. Para nosotros es una escuela, muy diferente al teatro y al cine, pero también es una manera de trabajar.
-¿Tiene correa Con el culo al aire para seis temporadas? -¡Ojalá!
-¿Se ve interpretándola seis años? -Si siguen escribiendo guiones como lo están haciendo y tiene personajes como los actuales, sí, porque una de las cosas que más admiro es el elenco, que no lo ha habido en mucho tiempo en la tele. Ana Wagener es una de las grandes del cine.
-Ustedes tienen dos Goyas. -Tres con el de Raúl Arévalo. Es una serie bastante premiada. A Janfri Topera le adoro, porque he descubierto que es un pedazo de actor y un gran compañero. Es un intérprete de una pasta muy diferente a lo que se da hoy día. Tenemos que recuperar artistas como él.
-¿Qué Sandra vamos a ver esta temporada en la comedia? -Va a sacar su otro carácter: su genio y carácter verdaderos.
-¿No le tienta el teatro? -Lo adoro, tengo muchas ganas de hacerlo. Con la tele es complicado compaginarlo, porque te exige una disponibilidad y un horario que no se puede tener.
-¿Y el microteatro? -Está funcionando muy bien. Quiero hacer algo en un parón de unos mesecitos que vamos a tener ahora. Me gustaría también bailar y cantar. Hubiera preferido ser bailarina a actriz. Estudié danza clásica y moderna, pero me gustaría cantar, no tanto para meterme en un musical, sino como afición.
