La inesperada subida de la participación en ocho puntos -35.000 votantes más- hizo a todos los partidos reprogramar sus calculadoras. Muchos miraron al movimiento 15-M como explicación a un fenómeno que no aparecía en ninguno de los sondeos previos a la campaña. A partir de ahí, el destino de ese voto era una incógnita. Parecía evidente que ni PP ni PSOE se verían beneficiados de él, pero podía jugar a favor de IU, del PA o de Upyd. Los análisis de los resultados demuestran que salvo el partido de Rosa Díez apenas ha tenido incidencia en el resto de formaciones. Todos han conservado prácticamente sus votantes, con la excepción del gran trasvase del PSOE al PP . En cambio, el nuevo sufragio se ha refugiado en otras opciones.
Los votos en blanco y nulo se han disparado. Hasta 15.726 personas tomaron esa decisión, prácticamente el doble que hace cuatro años. Pero lo que es más significativo es el auge de las formaciones minoritarias con escasas posibilidades de obtener el 5% mínimo para acceder al Ayuntamiento. En total, doce formaciones se reparten 11.356 votos, de nuevo prácticamente el doble que en 2007. Los Ciudadanos en Blanco logran 2.062 votos; Los Verdes -con sus siglas incluidas en IU y su candidato de 2007 en la lista del PSOE- suben en 800 votos hasta los 4.063; el Partido Antitaurino duplica sus apoyos, al igual que el Partido por un Mundo Más Justo o el Partido Humanista. En total, entre las opciones en blanco, nulo y los partidos minoritarios suman 27.082 votos, 13.000 más que en 2007, un 51% más.
Al margen de estas opciones quedan dos formaciones que pueden salir del perfil del partido tradicional. Por un lado, el PA, debido a su reciente salida de las instituciones. Sube en votos respecto a 2007, pero también esta vez incorpora al PSA. Los dos andalucistas sumaron hace cuatro años 16.018 votos. Y esta vez tienen 16.097. Su electorado es prácticamente idéntico.
La segunda formación de este tipo, Upyd, sí ha podido obtener apoyos de esta nueva movilización, al margen del electorado que haya podido robarle a PSOE y PP en los comicios. Alcanza los 10.945 votos en su primera convocatoria municipal.
Así, entre el aumento de 13.000 votos en opciones minoritarias y votos nulos y en blanco y el surgimiento con 10.945 sufragios de Upyd se podría reubicar buena parte de esa nueva participación en los comicios en la que confiaban PSOE e IU pero que les ha dado la espalda.
Si con el PSOE podía ser previsible, ante el desgaste producido por la crisis económica y la gestión a esas siglas, en el caso de IU su explicación debe ser municipal.
Ha perdido votos con un aumento de la participación pese a haber tratado de conectar con el movimiento 15-M y a haber liderado las acciones contrarias a las políticas económicas del Gobierno, incluida la huelga. La candidatura y el proyecto local de IU no han tenido calado alguno.
