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Los retos del fin del mandato en Sevilla

el 29 ago 2010 / 18:26 h.

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Los recortes y Tussam

El curso arranca con una crisis sin precedentes de la administración local. El Ayuntamiento tiene que cerrar un duro plan de recortes presupuestarios, analizar las primeras ordenanzas fiscales con una Corporación en números rojos y hallar una solución para Tussam, una empresa al borde de la quiebra con una propuesta de subida de tarifas encima de la mesa. Los conflictos sindicales tienen en el año preelectoral un escenario favorable para presionar a la administración.

Peatonalizaciones

El mandato se cierra con dos procesos de peatonalización en los que puede pesar más la improvisación de PSOE e IU que el objetivo y el resultado que se obtengan. Por un lado, San Jacinto, ya en obras y con los vecinos movilizados por el PP. Por otro, la zona de la Avenida de Roma, que volverá a estar en obras tras sólo unos meses.

Mercasevilla

Pese a los esfuerzos de PSOE e IU por sacar a Mercasevilla del debate político, como la exclusión del PP del consejo de administración, el proceso judicial encara una fase decisiva que el PP aprovechará en su papel de acusación particular. Nombres como el de Manuel Marchena o el de Antonio Rodrigo Torrijos vuelven a estar presentes en el proceso aunque de momento ni siquiera han sido llamados a declarar por la juez instructora, Mercedes Alaya.

Fibes

Una de las grandes obras del gobierno de Alfredo Sánchez Monteseirín está a punto de ver la luz tras un retraso de varios años y con un sobrecoste que ha tenido que asumir en parte el Ayuntamiento a través de Emvisesa. A la espera de que se definan las fórmulas de financiación, dada la paralización del proceso de explotación de los terrenos adyacentes, el Gobierno local podrá poner en valor el recinto.

Encarnación

Con más de tres años de retraso, el proyecto de Jürgen Mayer, con hasta tres ampliaciones presupuestarias a sus espaldas, encara la última fase. El mercado ya está listo y Monteseirín quiere hacerse la foto del fin de las obras antes de que concluya el año. Quiere lanzar de nuevo su mensaje: "Mereció la pena".  

Restricciones en el Centro

Con una ordenanza en vigor desde el inicio del mandato, el Ayuntamiento ha aplazado durante varios ejercicios la puesta en funcionamiento del sistema de restricciones al casco histórico. Ahora, ya con el Metro en marcha, se iniciarán a finales de septiembre con un fuerte rechazo vecinal. Los meses de prueba del sistema coincidirán precisamente con las primeras fases de la campaña electoral.

Los aparcamientos

Es uno de los fracasos más simbólicos del Gobierno local. Se prometieron en 2004 a miles de vecinos con problemas de aparcamientos en barrios con una importante presencia socialista como San Pablo, Cerro Amate o Este. Sin embargo, los residentes han visto pasar los años y las promesas, han abonado dinero y han confiado en el Gobierno local. El Ayuntamiento quiere al menos que los vecinos tengan indicios de que las obras se harán antes de los comicios.

Metro

La crisis ha vuelto a hacer estallar los plazos, pero la Junta y el Ayuntamiento han trazado una estrategia para poner en valor la ampliación del Metro antes de 2011. El proceso de participación acercará una obra cuyo retraso será utilizado por el PP.

Metrocentro y pasos inferiores

La obra de ampliación del tranvía hasta San Bernardo se ha solapado ya con la de la estación intermodal y la remodelación de la Glorieta del Cid. Al mismo tiempo se hará la pasarela de la calle Betis, y los dos pasos inferiores, en la Ronda del Tamarguillo y en Bueno Monreal. Pese a que estaban cerrados por ley los plazos de los planes estatales, se han sobrepasado en los grandes proyectos. El último curso del mandato y la recta final ante los comicios de 2011 se encarará con grandes obras en la calle, y casi todas ellas con argumentos suficientes para que la oposición reduzca el rédito que pueden llegar a producir. Algunas no llegarán ni a las elecciones.  

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