Un gran despliegue operativo consiguió ayer tras un intenso trabajo estabilizar los seis fuegos que seguían activos en la provincia de Teruel, que evolucionaban bien al cierre de esta edición, al tiempo que refrescaban los perímetros para que no haya rebrotes ante las previsiones de elevadas temperaturas para hoy.
En total, según las estimaciones del departamento de Medio Ambiente, podrían haberse quemado casi 11.700 hectáreas en la veintena de incendios registrados desde el pasado martes en Aragón, que fueron provocados por una tormenta eléctrica, que descargó más de 5.000 rayos.
Mientras, el mando único del Plan Infoex activó en la tarde de ayer el nivel 2 de alerta ante un incendio declarado en Las Hurdes, cerca de las poblaciones de Nuñomoral y Vegas de Coria, en la provincia de Cáceres, informó la Junta de Extremadura.
El fuego comenzó alrededor de las 13.00 horas en una zona de pinares cercana de la localidad cacereña de Nuñomoral y se propagó, posteriormente, hasta Vegas de Coria. Al cierre de esta edición permanecían activos tres focos, dos en Nuñomoral y un tercero en Vegas de Coria.
Además, otro incendio forestal se declaró en la tarde de ayer entre los términos municipales alicantinos de Pego y Sagra, según informó el Consorcio Provincial de Bomberos. El fuego se inició alrededor de las 19.20 horas en la Font del Paladrar, en una zona de pinares y de subida a la montaña, de difícil acceso.
Por último, cabe destacar que unas 150 personas seguían ayer trabajando en las labores de extinción de los incendios que desde el pasado martes afectan a Uña y Poyatos, en la Serranía de Cuenca, y que ya están controlados.
